Cap 31. Cazando a la Vivora
Will seguía encerrado su cuerpo dolía intentó golpear varias veces la puerta.
-“Will tranquilo aunque ellos lo crean tu no eres débil, sabes defenderte y eres más inteligente que ellos, solo aprobecha cualquier oportunidad a tu favor.” Se dice a si mismo.
No pasó mucho tiempo cuando Chen volvió a visitar al joven seguía teniendo curiosidad de que era lo que le atraía a Nan y Boom de ese hombre. El nunca entendió los gustos de Nan. Le parecía depravado y asqueroso que le diera igual hombre o mujer. A Nan solo le gustaba entrar en el juego de la conquista sin importar el género, solo el afán por conquitar y tener un nuevo trofeo. Y de Boom también era conocida su fama de conquistador mientras tubiese donde meterla el género le era indiferente para el. Chen sin embargo odiaba a todos esos maricones que se ofrecían en la cárcel para ser follados. El estubo a punto de ser víctima en la cárcel, por ser el objetivo devido a su belleza natural tanto para meter como para recibir dentro de la cárcel. Lo que lo llevo a meterse en fuertes peleas hasta que se salió con Nan que nunca lo miro de esa manera. Chen siente genuina repugnancia hacia esas otientaciones sexuales y no lo esconde de echo evita a Nan cuando está de caza porque sabe que acabará diciendo algún comentario que enfadara a Nan y este lo mandará a los trabajos fuera solo para no discutir con el.
Chen se pone a caminar alrededor del joven que es obligado a ponerse en pie y verle a la cara mientras le tiran del pelo obligándole a levantar la vista y para que Chen lo vea más detenidamente.
-¿Entonces qué es lo que les das a Nan y a Boom para que dos cabezas de la mafia quieran acostarse contigo? No eres tan guapo como otros niños que he visto en brazos de Nan. A diferencia de ellos se diría que eres viejo ya tienes casi 30. Tu piel si es blanca y suaves demasiado para ser un hombre. O será que eres de esos que tienen el sexo cambiado de cualquier cosa.- dice mientras que con una navaja rasga la camiseta que lleva puesta Will dejando los moratones de su cuerpo al descubierto.
- ...-Will se mantiene en silencio sin apartar la vista no piensa mostrarle miedo a ese imbecil.
-No si eres hombre ahí abajo- dice tocando el núcleo de Will- Uhm también lo eres, ¿entonces tu das o recibes? Sería divertido ve a Nan recibiendo de un enano como tu. Seguro que tu polla no mide más de una pulgada- dice Chen riendose mientras deja los pantalones de Will a la altura de sus rodillas y acaricia con dos dedos la tela que el separa del amigo de Will.
Cuando iva a meter su mano en la fina tela, Will forcejea con fuerza, pero lo bloquean todavía más. Cuando ya los dedos comienzan a tocar el bello púbico del hombre que empieza a gritar de desaprobación. Una entrada brusca interrumpe la acción de Chen haciendo que Will pueda zafarse del desagradeble toque.
-Jefe Chen …jefe Chen… los serpientes negras vienen a por el joven, dicen que quieren hacer un intercambio. Dicen que traen algo de valor para nosotros.
Chen sonrie mirando al joven que le mira muy disgustado.
-Que pena no podre descubrir que les das a esos dos pero bien parece que han tardado menos de lo pensado...- dice saliendo le la sala limpiandose las manos.
Cuando salen Chen puede ver a los hombres de Nan en el suelo sin saber que estan fingiendo estar heridos y Nan ensangrentado tirado delante parece muerto.
-Dame a mi hombre o toda tu banda acabara igual que este loco que ataco solo con 4 hombres. ¿Que pensó que le pasaría? Que sería vencedor atacandome así. Dame lo que es mio y me iré sin causar problemas.
-Khum Cherinsuk has matado a nuestro jefe crees que saldrás vivo -dice Chen a Boom amenazando.
-Puede ser pero si mate a tu jefe que es mil veces mejor que tú y era una serpiente blanca, una vivora como tu no será difícil de aplastar- grita Boom provocando.
ESTÁS LEYENDO
Mi querido Ami-enemigo
Romance4 niños que crecieron en un orfanato El destino los separa a una edad temprana, una amistad que se rompe por tontos mal entendidos... años después dos enemigos en plena guerra se reencuentran con aquellos que se separaron una vez amores que nacen s...