V e i n t i s é i s

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Tire la colilla del cigarrillo una vez que había terminado de fumar y me recargué en al auto de Jungwoo sin prestarles mucha atención a la conversación que Woo y Ten mantenían.

-¿Cuántos más de esos vas a fumar? Un poco más y vamos a parecer drogadictos.

La voz del tailandés me sacó de mis pensamientos y sólo pude rodar los ojos.

-Relájate -Dije tranquilamente.

-No, tú deberías relajarte y dejar de fumar como lunático.

-Eh chicos... ¿Me perdí de algo? -preguntó Jungwoo interponiéndose entre los dos.

-No. -Respondí firmemente mirando a Ten fijamente para que no dijera nada

-Sí, vamos Taeyong, dile a Jungwoo lo qué hiciste -lo miré incrédulo, ¿Cómo se atrevía a decir eso? ¿acaso pensaba delatarme frente a Woo?

-He dicho que no.

-Chicos de verdad no entiendo.

-Te pondré en contexto

-Ten...

-¿Jungwoo, cómo te sentirías si Lucas me besara? -preguntó y el chico abrió la boca sorprendido y a la vez atónito.

-¿Lucas te besó? -¿no se suponía que entre los tres él era el más inteligente?

-¿Qué? Por Dios, no, era sólo un ejemplo.

-Oh... Mmm me sentiría muy mal, ya que traicionaría nuestra relación y todo lo que construimos juntos, pero... Sigo sin entender

-¿Ves? -Está vez se dirigió a mi y sé que tenía razón pero eso no le daba el derecho de restregármelo a la cara.

-Espera... ¿Quién besó a quién?

-Nadie lo hizo, Ten sólo tiene una gran boca -No pude evitar ponerme a la defensiva.

-¿Qué? -dijo indignado. -Yo sólo intento ser un buen amigo, no quiero que te conviertas en ese tipo de persona.

-No te lo pedí.

-Creo que deberíamos calmarnos, su tono de voz...

-Taeyong besó a Jae. -abrí la boca sorprendido, no podía creer que lo había dicho.

-¿Qué? Demonios Taeyong, te dije que...

-Ya sé Jungwoo, he estado lidiando con cómo decirle todo este tiempo pero no he encontrado la forma.

-Taeyong...

-Cállate Chittaphon, todo este tiempo me ha estado atormentado tu maldito discurso de moral.

-Yo sólo quiero...

-¿Qué? -dije lo demasiado fuerte como para hacer que retrocedieran un paso -¿Qué admita que soy un maldito traidor porque besé a Jaehyun? -Finalmente lo hice, había admitido eso que el último mes no me dejaba dormir, el hecho de decirlo en voz alta fue abrumador incluso para mi, me sentía patético y la cara que tenían ambos chicos lo empeoraba, la cara de Jungwoo era la peor, estaba muy sorprendido y la Ten no sabía cómo descifrarla.

-¿Besaste a Jaehyun?

Mierda.

Los tres nos giramos rápidamente al escuchar una cuarta voz, es como si hubiéramos visto a un fantasma, mi enojo de disipó rápidamente al encontrarme con sus ojos llenos de decepción.

-Do... Yo -comencé a decir, sin embargo me interrumpió.

-Quiero que respondas a la pregunta que hice ¿Besaste a Jaehyun? -El tono dulce con el que se dirigía a mi siempre había desaparecido, ni un rastro quedaba, sólo su mirada herida esperando por mi respuesta, estaba en pánico, no podía seguir mintiéndole, no lo merecía.

-Sí... Pero yo no.

-No digas más, ya escuché lo que tenía que saber -una vez más me cortó y se dio la vuelta regresando por el mismo camino por el que llegó, su espalada se alejaba y yo no sabía qué hacer.

-Dodo...

-Taeyong, lo siento yo no quería...

-Ya hiciste suficiente Ten -respondí sin siquiera mirarlo y corrí tras Doyoung. -Espera, espera por favor, déjame explicarte.

-¿Explicarme o justificarte? ¿Me vas a negar que no lo querías? -dijo deteniéndose, no veía ni signos de que quisiera llorar, pero sí estaba muy enojado.

-No, no lo quería.

-¿Y entonces por qué dejaste que pasara?

-Porque... No lo sé, estaba ebrio. -Mi justificación sonaba estúpida, pero era la verdad, yo no sabía porqué lo había hecho.

-¿Cuándo pasó? ¿Cuándo se besaron?

-E-en... -de pronto recordé la fecha y me sentí una basura -En... Aghhh demonios -Para ese punto mis mejillas se sentían mojadas -En... Tu cumpleaños.

-Dios -dijo cómo si no pudiera creerlo.

-Lo siento, de verdad lo siento, quería decírtelo pero no sabía cómo y me siento tan arrepentido.

-Tengo que irme -dijo y volvió a girarse para marcharse.

-Dodo...

-Ah, lo olvidaba, ten -dijo extendiéndome un recipiente, lo tome.

-¿Qué es esto?

-Brownies, mamá los hizo para ti, es por eso que vine. -respondió y seguido de eso se quedó callado, un silencio sepulcral nos rodeaba y yo sólo quería que me abrazara y dijera que todo iba a estar bien.

-Doyoung por favor dime algo, maldíceme, grítame o incluso golpéame si eso te hace sentir mejor, pero di algo. -supliqué.

-No importa lo que diga Taeyong -soltó una risa burlona ¿por qué se reía? -jamás podré remplazar a Jaehyun en tu corazón ¿no es así?

-¿Qué? -Eso... no sabía si era cierto -Dodo, mi cariño por ti es sincero.

-Pero no suficiente -levantó la mirada y por Dios, casi me atraviesa el alma con ella -no cómo el amor que sientes por él. -Eso hizo que en mi corazón se instalara un hueco. -Yo... Necesito un tiempo, necesito pensar, así que por favor dámelo.

-Dodo... -Yo no quería un tiempo, quería que me perdonara.

-Adiós Taeyong.





-Destinity xx







El chico de los hoyuelos -JaeYongDonde viven las historias. Descúbrelo ahora