Capítulo 13

1.2K 80 6
                                    

POV Anahí

El reloj ya daba las 2:34 de la madrugada y el sueño aún no me daba.

En parte porque mi bebé se movía mucho y en parte por lo que pasó.

No quiero que se mezclen las cosas.

Ella me gusta, eso si. Me gusta mucho. Encendía un fuego en mi que no se va apagar aunque el desierto se haga mar.

He visto relaciones de gente en nuestra misma situación derrumbarse y la persona que siempre sale mal es el bebé y yo no puedo dejar que eso pase.

Tenías que ser Dulce María.

No me pude resistir aquella noche en el antro y apenas he podido hacerlo desde que la volví a ver. Lo de anoche fue un desliz pero lo deseaba, lo ansiaba, lo necesitaba.

Muero por besarla de nuevo y eso no era bueno.

Me removí en la cama. Esta noche si que no iba dormir.

Me levanté de la cama y salí de mi habitación. Baje las escaleras con cuidado y vi como una luz venía de la sala. Era la lamparilla de la mesita.

¿Se le olvidó apagarla?

Me acerqué y me sorprendí al ver a Dulce mirando por la ventana.

Con mucho cuidado me acerqué a ella.

-¿No puedes dormir?-pregunté.

Ella negó.

-Al parecer tú tampoco-volteó a verme.

Le di una media sonrisa.

-Se mueve mucho en la noche-dije.

Ella sonrió un poco.

-No se que decirte.

-No hay nada que decir. Por lo menos se mueve.

-Eso si-suspiró.

Hubo un momento de silencio.

-Has estado muy callada últimamente-noté.

Y era cierto. Entre los últimos días que pasamos juntas ella no era esa mujer habladora y bromista que solía ser. Hasta se le quitaba lo odiosa.

-¿Qué te puedo decir Any? Mi vida entera se ha puesto
patas arriba.

Soltó un suspiro.

-Y ahora tengo la cabeza yendo a mil por hora-admitió.

-¿Me quieres contar?

Me miró y luego volvió a la ventana.

-Pues primero me entero que seré mamá lo cual no es malo pero si te cambia la vida. El chico con el que crecí me traicionó. La mujer con la que pensé que algún día me casaría me jodió de la peor manera y ahora es que apenas estoy aceptando todo lo que ella me hizo y finalmente estoy llegando a términos con que todo se acabó. Y mi padre es un imbécil como siempre-admitió todo de cantazo.

-Okay eso es mucho. Vamos a romperlo de uno en uno.

Ella asintió.

Tome su mano y la hice seguirme al mueble.

-Lo de Paula, lo entiendo y estamos en las mismas.

Suspiré.

-¿Tu ex en serio te sigue poniendo mal?

-No es que me ponga mal, solo se me hace una locura. Jugaba juegos mentales conmigo y yo caía.

-¿Se te fue el amor antes de lo que ella te hizo?

La Madre De Mi HijaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora