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MARTINA POV

Miré a Lourdes a los ojos y vi una pequeña sonrisa formarse en sus labios mientras apretaba fuerte mi mano, y yo, petrificada en aquel lugar, solo podía mirarla. Mi corazón latía fuerte y mis piernas amenazaban con dejar de cumplir su función... ¿De verdad dijo lo que tanto desee? ¿De verdad sus padres lo han escuchado? ¿De verdad terminó su estúpida relación con el estúpido aquel? Todo estaba en total silencio, nadie se movía, quizás todo a mi alrededor se había detenido, ¿estaré soñando? Si es así, que nadie me despierte. Iba a ser feliz con Lourdes, sea donde sea, frente a quien sea. Seriamos ella y yo, sin importarnos nada...

Gaby: ¿Eres feliz?

Lourdes: Nadie jamás me había hecho tan feliz como ella.

Fabián: Debo irme.

Miré a Fabián pero ya él estaba caminando hacia la puerta, Lourdes me soltó y fue tras él, pero Gaby la detuvo.

Gaby: Dale tiempo...

Lourdes asintió y agachó la mirada, me acerqué a ella y simplemente la abracé, dejé un pequeño beso en su frente y ella me rodeó la cintura con los brazos.

- Te amo - susurré.

Lourdes: Y yo te amo a ti, Mar.- dijo fuerte y claro.

Yo sonreí pues sabía que ella quería que su mamá lo supiera y entendiera que es amor, simple y puro amor.

Gaby: Y bien, ¿Qué vamos a comer?

Lourdes: Pedí sushi.

Me guiñó un ojo y fue hasta la cocina a servir mientras yo me fui donde Emma y Delfi quienes jugaban sentadas tranquilamente en el piso.

- Hola pequeñas.

Emma sonrió al escucharme, yo me senté en el piso y Emma se sentó en mis piernas mientras seguía jugando con las piezas de madera.

Delfi: ¿Es tímida?

- Un poco.- sonreí.

Delfi: No ha hablado mucho desde que estoy aquí.

- Es muy pequeña aún, ni siquiera tiene dos años...

Delfi: ¿Te gusta ser mamá?

Casi me ahogo con mi propia saliva. Eso no lo vi venir... Ni siquiera lo había pensado de esa manera.

Delfi: Es que... Si mi hermana y tú están juntas, Emma es hija de ambas ¿no?

¿Lourdes querría eso? Ella no lo había dicho antes, jamás me propuso compartir la custodia... Yo tampoco se lo pregunté pero...

- ¿No estás muy pequeña para sacar esas conclusiones?

Delfi: No.

Me reí y me levanté cargando a Emma... Caminé hasta la cocina y vi a Lourdes y a Gaby hablando animosamente lo cual era bueno, según mi punto de vista.

Gaby: Oh, cariño, hablábamos de ti.

- ¿De mí?

Gaby: No, de ti - señaló a Emma mientras Lourdes reía. La bebé, sorpresivamente, extendió los brazos y se dejó cargar de Gaby.

Lourdes: Espero que se lleven bien.

Gaby: dile eso a tu hija, yo ya parezco amarla.

Lourdes sonrió y se acercó a mí, rodeó sus brazos en mi cintura y me abrazó fuerte mientras veía a Emma.

Delfi: Muy lindo todo pero... Tengo hambre.

Todos nos reímos. Ayudé a poner la mesa con Lourdes para poder sentarnos a comer, yo sabía dónde estaba todo así que no fue problema para mí, creo que Gaby lo notó.

KILOMETRAJE (ADAPTACIÓN MARTULI)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora