Qᴜɪᴇʀᴏ ᴜɴ ғᴜᴛᴜʀᴏ ᴊᴜɴᴛᴏs... 𝑀𝑇

15

Ellery Guzmán y Marco Castro

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Marco Castro —Barrancos, Culiacán.

—¡Te regalo! ¡Un pedacito de cielo, de mis labios un "te quiero", de mis manos las caricias, que te van a hacer sentir lo que yo siento por ti...! —canturreo Marco bajando las escaleras de la casa.

En el comedor de la casa se encontraba almorzando su familia, se miraron unos a otros mientras sonreían y dirgieron su mirada hacia donde apareció el influencer segundos después.

—¿Por qué tan feliz carnal? —cuestionó Kevin.

—Porque es viernes —respondió con una sonrisa.

—¿Y que tiene que... oh, mañana es sábado... ¡Y vas a ver Ellery! —chilló Kevin ganándose un golpe en la cabeza por parte de su madre.

—No estés gritando —regañó la mujer.

—Sí, perdón.

—¿La vas a traer a la casa? —inquirió Mayve.

—No sé, tal vez sí, tal vez no, todo depende.

—¿De?

—De como se sienta ella.

Todos los que se encontraban en aquella mesa, tenían una gran sonrisa en su rostro, su Marco había regresado, ese hombre cariñoso y sonriente que tanto habían extrañado, aún no conocían a Ellery personalmente y ya estaban agradecidos con ella por lo que había hecho con él.

[...][...]

Marco se encontraba trabajando en el nuevo diseño de sus gorras cuando la puerta de la oficina se abrió mostrando a Vitolias, el Gordo, Jaimico y Pityn.

—¿Qué rollo plebes? ¿Cómo andan o qué? —cuestionó el influencer con una sonrisa.

—Ajale, ajale, ¿Esa alegría que anda derramando es por la Ellery? —preguntó Vitolias tomando asiento.

—Así es; como diría mi compa el Jaimico.

—Eso es todo loco.

—¿A poco ya vamos a tener patrona otra vez? —preguntó el nombrado con una sonrisa pícara.

—¡Que te valga verga loco! —exclamó Pityn.

—¡Ey, ey ey!, Tranquilos, calmados, relajados —intervino Marcos—, y no, o bueno... no sé, todavía no sé.

Victor aguantó una carcajada ante la indecisión de su amigo, pues era más que claro que él, tal vez si quería llegar a algo más, pero sabía que no debería apresurarse para no espantar a la menor de los Guzmán.

Si bien era sabido por sus amigos y familia que él solía engancharse a las personas de inmediato, más si se trata de una mujer que le atrae y no necesariamente tiene que ser sexual. Marco no era de ese tipo de hombres que sólo le interesaba conocer mujeres para tener relaciones, era un poco demasiado especial y una de sus frases es "No le haría a una mujer lo que no me gustaría que le hicieran a mi hermana" esa es la razón por la que es aún más caballeroso de lo que se podría imaginar cualquier persona que no lo conozca personalmente.

Muchos hater's suelen inventar chismes sobre que él sólo quiere a las mujeres para algo "sexual", que cuando obtiene lo que quiere las bota, y no las vuelve a buscar más, como si nunca las hubiera conocido, pero claro, lo único que quieren es dejarlo en mal sin siquiera conocerlo cuando él ni siquiera los piensa en ningún minuto de su día.