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Celeste's pov

La despedida había sido dura, pero ya llevábamos dos meses en casa, y se estaba haciendo menos raro. Al volver al instituto y adaptarme a la rutina, tenía menos tiempo para pensar en lo mucho que quería volver a besar a Jeremiah, o lo mucho que echaba de menos las charlas con Conrad.

Lexa mi mejor amiga me venía contando todo lo que había echo este verano en mi ausencia, tengo que admitir que no le estaba haciendo mucho caso, me lo había contado ya por llamada varias veces, me sabía la historia de memoria.

Había ligado, pero tenía novio, y no sabía que hacer.

Yo le dije que "eligiera" al ligue, porque si de verdad quisiera a su novio, no se lo estaría pensando.

Pero se ve que aún le sigue dando vueltas.

— Tía ayúdame.

— Lexa yo ya te dije lo que pensaba, si quisiese a Ramson — su novio — No estarías pensando en... — no me salía su nombre.

— Trevor.

— Eso, Trevor.

— ¿Y como dejo a Ramson?

— Dile la verdad.

Me miró mal — Si claro, maravillosa noticia de miércoles.

— Es mejor decirle la verdad, antes de que se acumule y haga bola.

Y lo decía por experiencia.

— Voy a ir a hablar con él.

— ¿Ahora? — pregunté sorprendida.

Y si, fue en ese momento. Ramson le suplicó de rodillas que no lo dejase, a ella le dio igual, tenía su vista clavada en Trevor. Ramson lo notó, se levantó del suelo con la cabeza bien alta, se acercó a Trevor y le encajó un puñetazo perfecto en el puente de la nariz.

Ahí empezó una pelea, que acabó con Lexa, Ramson, Trevor y yo en dirección. Mientras el director nos echaba una gran bronca, mi móvil empezó a vibrar debajo de mi pierna.

Recé porque el director no se diera cuenta, pero si lo hizo, y me extendió su mano para que le diese el móvil.

Maldije por lo bajo, y se lo entregué de malas maneras.

— Lo podrá recoger su madre al finalizar el día lectivo de hoy.

— ¿Que? Mi madre no puede...

Me cortó — Sin discusiones señorita — ahora nos miró a todos — Y si vuelve a haber una pelea, os expulso a todos, ¿entendido?

Todos asentimos, y salimos del despacho. Lexa y Trevor se fueron de la mano, como si nada hubiese pasado. Ramson me quedó mirando.

— ¿Que hice mal?

Incluso me dio pena — No creo que hicieses algo mal Ramson, simplemente que uno no elige de quien enamorarse.

— Es injusto — se sentó en el suelo.

Miré a ambos lados, esto era una situación incómoda, pero no lo iba a dejar ahí.

— Lo sé, pero mira, ahora tienes mas tiempo para centrarte en el fútbol.

Eso lo hizo reír un poco y sorber la nariz. Sabía perfectamente que Lexa no le dejaba asistir a todos los entrenos, con la excusa de que no pasaba el suficiente tiempo con ella.

Me parecía una tontería, pero tampoco me dejaba discutírselo.

— ¿Que tal tu verano? — preguntó.

Do you even think about me? || Jeremiah FisherDonde viven las historias. Descúbrelo ahora