"Como sabrás, muchos años después, en el ocaso de nuestras vidas, Vegas tuvo una recaída contra la que ya no pudimos seguir luchando.
Estoy dando lo mejor de mí y sé que él continúa luchando.
Le noto cansado. Parece rendido. No obstante, cada vez que me persigue con sus juguetones ojos, continúo encontrando el eclipse en su mirada. Ese brillo que nació en su interior durante los mejores años de nuestra juventud y que jamás se ha disipado.
Me hubiera encantado celebrar sus cinco décadas en casa, pero, cómo verás, mi amigo, las circunstancias no están a nuestro favor.
Hasta ahora sigue siendo el primero en despertarme para que iniciemos con las labores de casa. Ciertamente aquí no hay mucho por hacer. Vivimos alejados de las zonas turísticas así que el ambiente es tan tranquilo que a toda hora soy capaz de escuchar los rumores de las olas golpeando las piedras de la bahía. Las urracas que cantan desde temprano. Las gaviotas que picotean el borde del mar para extraer su comida.
Aun no comprendo por qué decidió pasar sus últimos días en este lugar.
Confieso que me desagrada.
Pienso que, cuando él no esté, me será complicado volver aquí sin evocar su presencia. Quizá esa sea su principal intención. Pero, en ese caso, ¿no crees que todo a mi alrededor podría ser tortuoso si se trata de traerlo a mi memoria?
Desde niño crecí con la ilusión de vivir cerca de una playa donde pudiese pasar mis tardes recostado en la arena viendo el sol metiéndose y reflejándose en los bordes del agua.
Ahora me temo que odio todo esto.
Odio pensar que en algún momento tendré que regresar solo.
No se lo he dicho, por supuesto, pero él lo sabe. Es consciente de que me atormenta cerrar los ojos por las noches temiendo que, al otro día, él ya no será capaz de despertarme como lo hizo durante estos años.
Me abraza hasta que el cansancio me hunde y me arrastra a la somnolencia donde vuelvo el tiempo y sueño con el día en que lo conocí.
Cuando, desde la poca consciencia de mi realidad, reproduzco las imágenes de ese Vegas derrotado que, sin saberlo, en algún momento se volvería mi universo entero.
He de confesarlo: yo también me siento fatigado.
¿Cómo están las cosas por allá, Chan? ¿Pudiste resolver los pendientes de la fábrica? Discúlpame si me he desentendido de todo en estos últimos meses. Tú podrás comprenderme.
Estoy esperando.
Estoy aquí viendo cómo el amor de mi vida a cada instante se queda sin vida.
Sostengo su mano.
Y duele.
Pero también reconforta.
Nunca pensé que podría amar a nadie como lo hice con este hombre. La única pregunta que salta a mi cabeza conforme el tiempo se acerca es: ¿qué voy a hacer si un día de éstos él ya no está?
Y cuando sus ojos se cierren, mi viejo amigo, yo también habré muerto. Porque sé que ambos hemos vivido lo suficiente
Discúlpame, debo dejar de escribir. Iremos a caminar antes de que el sol se esconda. O antes de que la luz abandone su mirada. Y la mía, a su vez, se apague.
Lo besaré nuevamente. Le repetiré cuánto lo quiero. Y le recordaré que, aún a pesar de las desavenencias, amarlo hasta mi vejez ha sido la mejor herencia que pudo haberme obsequiado
Con cariño, Pete Theerapanyakun" .
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Carpe Diem [VegasPete]
FanfictionA Pete la suerte nunca le sonrió. Condenado a abandonar sueños y metas por sus escasos recursos decide tomar el puesto de su viejo padre como un simple taxista de medio tiempo a quien el destino relega a la tediosa rutina. Hasta que, en una madruga...