Parte 17

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Hace 3 años
POV JUNGKOOK

Tenía años desde que Jungkook no había regresado a Corea, estaba tan feliz de vivir en el extranjero que en realidad no extrañaba su casa, nunca había estado a favor de los negocios ilegales de la familia así que eso tampoco lo hacía querer volver, pero su padre lo amenazo diciendo que si quería seguir viviendo fuera tenía que venir a visitar aunque sea una vez a su madre, así que decidió ir a visitarla durante sus vacaciones de verano. 

El vuelo había sido cansado y solo quería llegar a casa, tomar una ducha y dormir un rato, entonces mientras tomaba mi maleta alcancé a ver a mi hermano mayor el cual me hacía señas para que fuera hacía él, me acerqué y me recibió con un gran abrazo.

— Pequeño cuanto haz crecido ¿donde dejaste al pequeño con ojos de venadito a medio morir? — comenzó a molestarme.

—- Desapareció en el momento en que llegó a Nueva York —dije en broma.

—Un placer verte de nuevo hermano, se te extrañaba— me decía mientras me daba una palmada en la espalda.

—Igualmente Yoon ¿como has estado? —

—Bien ya sabes, largas noches y largas horas de trabajo— lo decía de una forma despreocupada, pero yo sabía a lo que se refería y no era exactamente a las horas de oficina.

—Si, supongo —fue lo único que conteste.

Yoongi siempre había respetado mi decisión por no involucrarme en el clan, incluso cuando éramos pequeños me decía que él sería el mejor de los jefes que haya tenido la familia Min y que yo no tendría que preocuparme por nada.

—Pero bueno no importa, deja te ayudo con tu equipaje para subirlo al auto— dijo Yoongi y ambos subimos al coche y nos fuimos a casa.

La casa estaba exactamente como la recordaba  abrí la puerta y apenas crucé el umbral cuando mi madre ya me estaba esperando.

—Oh, mi bebé —me abrazo eufóricamente.

—-Madre cuidado me lastimas —dije en broma.

—No me interesa, te abrazaré todo lo que quiera para que no te vayas de nuevo— dijo ella a lo que solo me reí.

—Hijo estás tan delgado ¿es que no comes?, puras hamburguesas y Sprite de seguro, espera, deja pido para que te preparen algo—

—No tienes que molestarte madre, solo quiero bañarme, el viaje fue muy largo —

—Bueno, está bien, báñate, pero después comes algo, ¿está bien?— le dije que si y me fui a mi habitación, desempaque algunas cosas, tome un baño, salí y me recosté en mi antigua cama, estaba tan cansado que no noté cuando me quede dormido, pero de pronto escuché que tocaban la puerta, me desperté y vi que ya eran las nueve de la noche habían pasado casi ocho horas, escuché que abrieron la puerta y era mi padre.

—¿Estas despierto ? tu madre está a nada de un colapso nervioso por que no haz comido nada—

—Lo siento me quede dormido no me di cuenta, creo que el cambio de horario me afectó más de lo que pensaba—

—Baja rápido te vamos a esperar— mi padre estaba apunto de salir de la habitación cuando no pude evitarlo.

—También a mi me alegra verte padre— él se detuvo en la puerta y volteo de nuevo hacia mí.

— Ya vas a empezar con tus cosas—

— No estoy empezando con nada padre — le respondía mientras me vestía.

Mi destinoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora