Mi destino

Parte 10

POV YOONGI

Salí de la casa completamente furioso, camine hasta mi auto y me subi cerrando la puerta de un solo golpe.

—!Maldita sea!— grite lo más fuerte que pude mientras golpeaba el volante.

Tenia una oportunidad de poder acercarme a él y la arruine, y para colmo no había sido nada fácil para mi, primero llegue a la casa de mis padres para recoger unos papeles de la oficina y fue cuando noté como el aroma de Jimin se encontraba por toda la casa, ese aroma que tanto había deseado estaba justo aquí, así que no pude evitar ir hacia él.

Entre a la cocina atraído por su aroma y ahí estaba él, con su pequeño y delicado cuerpo intentando alcanzar algo de la alacena, me aproxime para ayudarlo y una vez que estuve cerca sentí como se tensaba en cuanto noto mi presencia, y es que la distancia entre nosotros era tan pequeña que yo sentía que mi lobo se estaba volviendo loco, pero tenía que controlarme, no era el momento y no quería asustarlo, entonces pensé que sería una buena idea ofrecerme ayudarlo solo para pasar un poco de tiempo junto a él, no me importaba qué en realidad todo lo que estábamos haciendo era una sorpresa para mi hermano, evite pensar en eso y preferí aprovechar mi tiempo con el Omega, fue así que pasamos casi todo el día platicando, pero no voy a mentir, hubo momentos en que simplemente pensaba en tomarlo de la cintura, acércalo a mi y besarlo sin importarme nada en el mundo, y es que había estado tan obsesionado con su aroma que tenerlo tan cerca era un martirio.

Después de varios momentos de tensión entre nosotros y de la noticia de que mi hermano no vendría supuse que todo estaba marchando de maravilla, pero entonces fue cuando llego la hora de la maldita cena que arruinaría todo, las velas, las rosas todo estaba a mi favor, solo necesitaba ganarme un poco más de su confianza, me senté lo más cerca que pude de él, me gustaba verlo, sentir su aroma, escucharlo hablar, pero lo que más me gustaba era verlo mover lentamente esos tiernos y dulces labios con cada una de sus palabras, y el solo imaginar lo que esos labios sabían hacer me enloquecía.

Me gustaba platicar con Jimin y escuchar su dulce voz, pero la verdad era que yo solo quería detener sus labios con un dulce beso y poder hacerlo mío toda la noche; pero entonces, fue cuando todo empezó a salir mal, el rubio me saco de mis estupidos pensamientos cuando menciono a Jungkook y su primer beso y me recordó qué tal vez esos dulces labios jamas serían míos, entonces sin esperarlo mi lobo enfureció, fue por eso que le grite y lo callé, pero también fue cuando note la mirada Jimin el cual se veía bastante asustado y confundido, yo sabía  que lo había echado a perder.

Y como si no fuera poco justo en ese momento recibí una llamada de Namjoon, era importante, y es que al parecer alguno de sus hombres había visto a Taemin, después de tres malditos años alguien por fin sabía algo de él, de ese maldito que casi terminaba con mi vida y al cual juré destruir esa noche, Taemin había regresado, por eso tenía que salir de ahí, Jimin ya estaba los suficientemente asustado y no creo que mi furia la cual aumentaba rápidamente me ayudara con él en este momento, así que creí que lo mejor era irme.

Cerré los ojos y recargue mi cabeza en el asiento del auto, recordando lo imbecíl que había sido, respiré profundamente, necesitaba calmarme de alguna manera, necesitaba un vaso de Whisky urgentemente.

Mientras seguía intentando controlarme recordé dos cosas, la primera fue que por un instante después del incidente de las copas pensé que Jimin se acercaría y me besaría, incluso creo que mi lobo lo pensó también, pero al parecer solo fue mi imaginación, después durante la cena su comentario sobre que quería escapar, no sé si era mi obsesión pero por un segundo pensé que hablaría sobre esa noche pero para ser honestos no estaba poniendo mucha atención, mi deseo por tenerlo mas cerca y su embriagador aroma me tenían completamente distraído, tal vez fueron solo ideas mías, y creo que yo tampoco estaba aún listo para hablar de esa noche, entonces mi teléfono sonó de nuevo, en esta ocasión era Hobi.

— Ya estoy en camino— dije cortante y colgué, no tenía ganas de hablar.

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Entre a la oficina, Namjoon y Hoseok ya se encontraban ahí, al parecer también ellos habían interrumpido sus planes el día de hoy, camine directo hacia la botella de whisky que tenía justo detrás de mi escritorio, me serví un vaso y me lo tome de un solo trago, sentía como quemaba mi garganta y eso era justo lo que necesitaba.

— Parece que alguien no a tenido un buen día— dijo Hoseok.

— ¿Interrumpimos algo?— pregunto el más alto con notable sarcasmo.

— No es de su incumbencia— respondí, y noté como simplemente se miraban entre ellos, y es que ellos eran las personas que mejor me conocían como para saber que no tenían que hacer más preguntas.

— Háblenme sobre Taemin, ¿Que es lo que saben?— pregunte.

— Ayer en la noche uno de mis hombres de confianza vio a un pequeño bote llegar al muelle, se le hizo extraño por lo cual se acercó a investigar— comenzó Nam.

— Al principio no estaba seguro de quien era, pero menciona que alcanzó a observar a dos hombres, uno era el conductor y el otro un simple pasajero, este último le pago al chofer del bote y camino por el muelle durante un rato, y se le hizo aún más sospechoso es que el hombre parecía nervioso —

— Sabe que es una idea suicida regresar cuando Yoongi está tras de él — dijo el pelirrojo.

— Lo más probable — confirmó el moreno y continuó con la platica.

— Después de un rato un auto negro se acercó al muelle, las luces del auto alcanzaron a iluminar el rostro del hombre y fue cuando mi contacto confirmó de que se trataba del Jefe Kim—

— Sabes quien era la persona que fue por el— pregunté de nuevo.

— No, solo sabemos que aparentemente se trataba de un omega, o al menos eso es lo que cree mi hombre pero no sabemos nada más—

— ¿No tenemos ni idea de donde podría estar escondido?— continuaba con las preguntas.

— No, ninguna, tanto Nam como yo dimos instrucciones a nuestros mejores hombres para que comenzaran a juntar información, pero la verdad es que desde que Taemin huyó el clan a mantenido sus negocios en secreto y lo más privado posible, pero esperamos encontrar algo— dijo Hoseok.

— Quiero que me mantengan informado de absolutamente cualquier cosa, seré yo quien se encargue personalmente de él—

— Yoon, no crees que deberíamos de informar a tu padre— dijo Nam un poco preocupado.

— Esto es entre Taemin y yo, mi padre no tiene nada que ver— respondí.

— Es el jefe del clan, y creo qué tal vez debería de saber qué planeas asesinar al jefe de unos de los clanes más fuertes, tu sabes que esto nos puede traer serias consecuencias—

— Asi como Taemin intento asesinarme, el también debe de afrontar las consecuencias y seré personalmente YO quien se encargue de él, con o sin la aprobación de mi padre — ya me encontraba lo suficientemente molesto.

— Yoon, no lo tomes a mal, tanto Nam como yo siempre estaremos de tu lado, pero también nos preocupamos por el clan, si tu decisión es terminar con él lo respetaremos, solo no queremos que te pase nada — dijo Hoseok intentando calmar el ambiente, mientras Nam asentía levemente con la cabeza, él no estaba complemente de acuerdo pero siempre apoyaría y estaría del lado de Yoongi sin importar las consecuencias.

— Creo que en este momento necesito un tiempo a solas, seguiremos con esto luego— dije para que ambos se fueran, y es que era lo que quería en estos momentos estar a solas.

Ambos alfas se levantaron de sus asientos y se dirigieron a la salida.

— Por cierto, ¿trajiste los papeles de la junta con los Japoneses?, recuerda que también tenemos otro negocio que cuidar— le recordó Namjoon antes de salir.

— Los deje en casa de mi padre, salí tan rápido que los olvidé — y era la verdad.

— Está bien luego paso por ellos, nos vemos Yoongi no tomes mucho— dijo Nam con una ligera sonrisa antes de cerrar la puerta, aunque aún se notaba un poco de preocupación en su rostro y es que sospechaba que los planes del pelinegro serían tomarse lo que quedaba de whisky en la botella y pensar en todas las formas en las que podría destruir al clan Kim.