Capitulo 4 Recuerdos

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Apenas si había terminado con la llamada corrió a su habitación a cambiarse, era claro que no dejaría que la volviera a ver con aquellas marcas y con esa blusa era imposible cubrirlas muy bien, así que solo eso haría, usaría una blusa bonita, pero que cubriera por completo sus brazos y su cuello. Tras terminar de arreglarse al menos un poco bajó a la cocina a prepararle un poco de jugo a su pequeña y en seguida ahí estaba con su pequeña.

—¿Cómo te sientes? —preguntó entrando con el jugo y un poco de fruta.

—Me duele la cabeza mamá —se sentó al verla entrar— ¿y papá?

—Ya viene para acá, no debe tardar en llegar —se acercó colocando la charola sobre el buró— tu tía recomendó jugo de piña y naranja, así que no le hagas el feo y tómatelo, además de comer un poco de fruta...

—¿Piña?, pero ¿por qué piña? —hizo una mueca al verlo.

—Eso fue lo que recomendó tu tía, así que bébelo, no quiero que enfermes más, ¿de acuerdo?, se una buena niña —Acarició su cabello, extendiéndole el vaso.

Tomó el vaso observándolo— ¿No se le pudo haber ocurrido otra cosa?, si lo bebo enfermare más —murmuró dando un sorbo y haciendo una mueca.

—No mi amor, así te recuperarás más rápido —se sentó a su lado acariciando su cabello— ¿te sientes mejor?

—Esto sabe horrible

Sonrió ligeramente— Después te compraré un rico pastel, ¿de acuerdo?

—Está bien —murmuró bebiendo un poco más.

Al ver que terminaba de beber el jugo volvió a colocar el vaso sobre la charola— Ahora duerme princesa, debes descansar —besó su mejilla— me quedaré a cuidarte mientras llega tu padre, ¿sí?

—Si mamá —se recostó— pero no tengo sueño

—Debes descansar mi amor —murmuró acurrucándola sobre sus piernas— no quiero que enfermes más, sabes lo preocupada que estaba

Se acomodó cerrando sus ojos— Mamá...

—Shhh descansa —sonrió sutilmente acariciando su cabello para hacer que durmiera, solo esperaba que Seiya no tardará en llegar para que comprobara que su pequeña se encontraba mejor.

Cerró sus ojos acomodándose, disfrutando de sus caricias. Hasta ahora su plan estaba dando resultado. No paso mucho tiempo, cuando la habitación se abrió, dejando ver a Seiya un tanto agitado, pues había subido corriendo las escaleras.

—Shhh... —le hizo una seña de que no hiciera ruido, su pequeña ya se encontraba dormida, con cuidado se levantó para no despertarla— se acaba de quedar dormida —murmuró.

Se acercó observándola— ¿Cómo está? —se acercó observando a su princesa durmiendo.

—Mejor, al menos tomó un jugo de piña —sonrió ligeramente al recordar sus muecas— pero tendrá que estar en reposo durante una semana

—Su fiebre es alta —tocó su frente— ¿qué dijo Rei?

—Que con la inyección que le puso sería suficiente y que tomara mucho jugo de piña y naranja. Creo que por no beberlo se recuperara rápido, le sugerí internarla, pero dijo que no era necesario, solo reposo

—Entiendo, de todas formas, hay que estar pendientes. No quisiera que enfermara más —murmuró observándola.

—Yo tampoco —suspiró sutilmente observando a su hija— estaba muy preocupada por ella, tenía miedo de que algo malo le pasara

—Yo también, tengo miedo de que algo le suceda. Moriría si algo les pasara

Volvió la mirada hacia él— No te preocupes, cuidaré de ella muy bien, así como tú cuidaras de Serenity

Nuestro Amor se ha Vuelto AyerDonde viven las historias. Descúbrelo ahora