Sweet Little Creatures In One Home [L.S] (Trilogía SLC II) [M.Preg]

Fin / Nochebuena

Harry no para de correr por toda la casa, subiendo y bajando. Con la vista en cada uno de los integrantes de su familia, esperando no verlos acercarse a esa pequeña puerta debajo de las escaleras, que nadie usaba más que para guardar cosas que no necesitan y no creen necesitarlas pronto. No sacaría de ahí su regalo hasta casi la cena.

Preparaba un pastel para su pequeña, el favorito de ella. Fresas con crema.

Louis, en cambio, permanecía a la distancia, mirando a su esposo tan emocionado por esa cena en la víspera de Navidad, sonriendo, mostrando sus dos hoyuelos perfectos.

Tomó un suspiro, volviendo a escuchar las palabras que su esposo balbuceó anoche. Esperaba hablar con él de ese tema en especial, sin saber cómo no afectarlo, viéndolo tan bien en ese día.

Thommas paró a un lado de Louis.

—Dícelo, papá.— susurró.

Louis platicó de ello en la mañana con su hijo, obteniendo esas mismas palabras como respuesta.

Louis asintió, dando unos pasos hacia la cocina. Probando un poco del betún que tenía Harry en la isla de la cocina.

—Sin manos sucias en mi cocina.— Harry le dio un ligero golpe en su mano con la toalla de cocina.

Louis la quitó de encima, riéndose por la actitud vacilante de Harry.

—Lo siento.— metió su dedo a su boca, quitando los restos de el. —Amor, estuve pensando anoche...— decidió acercársele a paso lento.

Harry parecía estar muy concentrado en su pastel, pues solamente asintió para que Louis siguiera hablando. Prestaba atención a ambas cosas.

—Más bien, lo pensé después de escucharte en la noche.— empezó. —Volviste a hablar dormido y dijiste algo que me dejó pensando mucho.

—¿Qué dije?— preguntó con un poco de desinterés.

—Dijiste que íbamos a tener un bebé.— soltó.

Harry no se movió después de escucharlo. ¿Entonces su esposo ya sabía de la noticia que daría en la cena? No tardó en arrepentirse de hablar en sus sueños. Louis siempre se enteraba de todo lo que él quería debido a ello.

—¿L-lo dije?— preguntó con un nudo en la garganta.

Louis asintió, tomándolo por las mejillas.

—Amor, si lo quieres... podemos volver a intentarlo en este año. Creo que tomamos un buen tiempo de descanso.

El alivio volvió al cuerpo de Harry, tenía suerte de tener a Louis como esposo, algunas veces no analizaba bien las cosas y podía equivocarse.

Su sorpresa seguía intacta y no había ninguna sospecha de por medio. Soltó un suave suspiro, colocando sus manos en el mismo lugar que Louis tenía las suyas, su mejilla.

—Sí, podemos intentarlo. Creo que tendremos suerte la próxima vez.— musitó.