Sweet Little Creatures In One Home [L.S] (Trilogía SLC II) [M.Preg]

Galletita

Harry preparaba la cena para todos, mientras que Louis preparaba el biberón de la pequeña, y Thommas jugaba con Ayla a darle toquecitos en su pancita y mejilla. Había hecho el descubrimiento de que eso la hacía reír mucho y la mantenía entretenida.

El pequeño se dio cuenta de varias cosas desde que su hermanita nació. Sin duda, hubo un cambio desde que su papá Harrry hizo ¡wush! después de bajar de la mano con su papá Louis y sus tíos corriendo detrás de ellos, llevándolo a él de la manita. Tomando muchas cosas de la casa para llevar a su papá al hospital.

Había un poquito más de atención con su hermanita, sí. Pero no para hacerlo sentir mal como se lo hizo pensar Santi.

Sus papis se encargaban de recompensarle eso. Cuando la bebé dormía y ellos jugaban con él, o platicaban. Cuando uno de sus papis hacía la tarea con él y el otro cuidaba de la pequeña pero también le prestaba atención y se metía de vez en cuando en el tema. Cuando la bebé dormía o estaba quieta y ellos hacían su tarde de películas de Disney que adoraba más que a nada en el mundo. O cuando dejaban a Ayla con alguna de sus abus para pasar un día con él.

Jamás se sentía aislado, o triste. Se sentía muy feliz. Hasta creía que era cuando más pasaba tiempo con ellos. Había más tiempo en familia. Pues gracias a la llegada de la pequeña, aprendieron a acomodar sus tiempos. Dándole el indicado para cada quien.

De tanto jugar con su hermanita y pensar en varias cosas. No se dio cuenta que los platos en la mesa estaban puestos, y sus papás ya se habían sentado a su lado. Llamando su atención.

—¿Cielo?— Harry arrugaba su entrecejo.

—Papás llamando a Thommy.— Louis reía pasando su mano frente al pequeño.

Reaccionó, sacudió su cabecita.

—¿Uh? Sí papis.

—Come, bebito.— le señaló su plato. —Hice tu cena favorita.

Thommy puso sus ojos en su platito de color rosa. Tenía una pequeña hamburguesa frente suyo.

Había dejado de lado McDonald's al descubrir que su papá Harry hacía las mejores hamburguesas. Amaba comerlas, y a veces las pedía como cena. Harry lo consentía haciéndole una pequeña. Siempre lo hacía al terminar la semana. Era su premio por soportar sus clases.

—Uhhhh, sísí.— sonrió y con sus manitas la tomó. Dándole una mordida.

Louis sonreía al verlo tan feliz comiendo. Amaba que se alimentara tan bien, al igual que Harry. La pareja fijó su atención en la bebé, que bebía del biberón con la misma emoción que su hermano. Eso les hizo agrandar la sonrisa en sus labios.

—¿Te gusta la hamburguesa que preparó papá para ti?— preguntó el castaño.

—Mucho, papi. Gracias.

—De nada, cielo.

Thommas dejó su platito limpio en cuestión de minutos. Poniéndose de pie de la mesa y dejando su plato y vaso caer en la tarja de la cocina.

Iba a ponerse su pijama cuando Galletita captó su atención. Hecho bolita en la alfombra de la casa, casi dormido, de no ser porque veía que sus ojitos se movían, como si parpadeara. Entonces, volvió con sus papás. Ahora Louis cenaba y Harry sacaba el aire de su pequeña.