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Gritos despavoridos, más súplicas se escuchaban en toda la ciudadela, varias casa y tiendas eran quemadas, allanadas, los soldados del reino Calmaria atacaban a los ciudadanos, también habían logrado entrar al castillo dónde se desató una lucha entre soldados y guardias.

Selion también luchaba en el gran salón principal, vestía su armadura a medias y manejaba con habilidad la espada, evitando que fueran más allá, debía proteger a su reina e hija, las cuales estaban a salvó en la torre norte, con varios guardias custodiando la entrada.

Más gritos y sonidos de cristal rompiéndose llamo la atención de todos, haciendo que dejarán de luchar, atentos a lo que afuera sucedía, sin animarse a salir y ver qué pasaba, un soldado entro corriendo, bañado en sangre, cayó de rodillas.
- U-un dragón… lo-los mató… a todos – exclamó, el terror reflejado en su rostro, Selion frunció el ceño, avanzó para salir, pero se detuvo en seco.

Asomo el hocico por la puerta derrumbada, una de sus patas delanteras y después la otra, entrando despacio, gruñía mostrando sus dientes manchados de sangre, al igual que sus garras, bigotes y algo de la melena en su cabeza, sus ojos azules, casi eran opacados por el negro de sus pupilas dilatadas.

Era lo más cercano a una bestia.

Resoplaba mirando a todos, pero sus sigilosos pasos se dirigieron al rey que se mantenía con la barbilla en alto, sus ojos se toparon con los de la criatura que se irguió frente a él, en una muestra de que él era superior ahí.

- Matalos a todos – ordenó Selion apuntando a los soldados que estaban dentro, al no recibir una afirmación lo apunto con la espada.

- No oíste, mátalos, o él morirá – la dirección de su espada cambio de dirección y él la siguió, dos guardias entraban al salón sosteniendo a Jungkook, gruño mostrando los colmillos y arrugando la nariz.

- Bien, ahora que harás, tu decides – concluyó retrocediendo unos pasos.

Tú no eres un monstruo, jamás los has sido, todos ellos están equivocados, entiendes, no eres un monstruo”

Miro donde tenían al azabache, después a los soldados, vio sus garras cubiertas de sangre, ese no era él, no mataba, no dañaba por más enemigos que fueran, los de su especie estarían decepcionados de él, por dejar que un simple humano inferior le diga que hacer, y no precisamente cosas buenas.

Resoplo retrocediendo, Selion noto que no tenía intenciones de acatar su orden, bufo negando, nadie, en absoluto, desobedeció sus órdenes, miro a los guardias que tenían al azabache y con un gesto dio la orden.

Pero, el dragón actuó más rápido que los demás, con su cola golpeó a los guardias, incluido el azabache, con una de sus patas delanteras empujó al rey, que con agilidad hizo una cortada algo profunda en su pecho, esa parte no estaba cubierta por escamas, gruño fuerte que hizo eco, vio la salida, tenía que salir de ahí.

Jungkook rodó lejos de los guardias, gateando a la salida, cuando fue atrapado por una pata del dragón que salió de ahí, voló por el alrededor del castillo, buscando a Charlie, lo vio en la torre norte donde se quedaban, le indico que saltara y lo agarro con una pata trasera.

- Que no escapen!! – grito el rey, pero ta era un poco tarde para cuando los guardias salieron, no había señales de ellos, y una neblina muy espesa cayo sobre todo el castillo, dificultándoles salir, ya que no veían nada, ni a su compañero que estaba a menos de medio metro.

Cayeron en el suelo, Taehyung cayendo encima de Jungkook que se quejó por la no tan suave caída, se quedó quieto unos segundos asimilando el dolor y el peso sobre su cuerpo, abrió los ojos viendo el cielo nublado hasta que su vista cambio a unos ojos azules.

Last DragonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora