Lía Weasley

Capítulo 6 Baile de Navidad

—¿Y bien? ¿cómo me veo?

—Estas hermosa Lía, no puedo creer que vayas a ir sola.

—No tenía a quién invitar— la pelirroja se encogió de hombros— no es como que socialice mucho.

—Tal vez vayas sola, pero espero que no vuelvas sola, ya vete se te hará tarde.

Lía tocó la puerta del salón y un elfo fue el encargado de abrir la puerta y de tomar su abrigo, la chica había escogido un lindo vestido verde oscuro con un lindo escote y la espalda descubierta, su cabello ahora liso lo tenía en recogido bajo, un maquillaje ligero y unos aretes plateados.

—Señorita Weasley bienvenida, se ve encantadora hoy.

—Gracias Profesor.

Al principio del baile Slughorn se había enfocado en presentarla a personas importantes del ministerio, presentándola como una de sus mejores estudiantes, algunas personas se sorprendían al escuchar su apellido, pero gracias a Merlín no hacían preguntas.

—Creo que deberíamos pasar a cenar, adelante, adelante

Se sentó al lado de una chica que jamás había visto y un chico que creí haber visto en la mesa de Ravenclaw.

—Marcus Winger— dijo el chico a su lado.

—Lía Weasley.

—Señor Winger ¿cómo está su padre? Para los que no saben el padre de Marcus es auror.

—Está bien señor, con mucho trabajo todavía hay investigaciones sobre los mortifagos, sabrá que es muy difícil sabré quienes actuaron por voluntad propia o bajo la maldición imperius.

—Seis años y todavía hay mortifagos sueltos, bajo arresto domiciliario claro, he escuchado que aún hace falta personal en la oficina de aurores.

—Así es señor, pero las pruebas para entrar limitan los ingresos, muchos murieron durante la guerra y los que ingresaron después la mayoría cambio de trabajo después de 2 años.

—Bien, envíale mis saludos de mi parte a tu padre.

—Claro, señor.

Slughorn siguió interrogando a los estudiantes, la mayoría tenía familia en cargos importantes en el ministerio.

—Señorita Weasley, tengo entendido que su familia trabaja en el ministerio igual.

—En Realidad no sé qué hacían— Mintió no quería hablar de su familia con el profesor Slughorn, cuando él tal vez lo conozca más que ella.

—¿No trabaja su familia en el ministerio? Al menos la mayoría de los Weasley.

—No recuerdo muchos a mi madre, era muy pequeña cuando ella murió— dijo incomoda, todas las miradas estaban en ella.

—ohh lo siento mucho yo... yo

—¿Has pensado que hacer al salir de Hogwarts?— rompió el momento cortante Marcus, le dio una sonrisa en modo de agradecimiento la cual le devolvió.

—Sí, he pensado en auror, pero igual me llama la atención ser sanadora

—Muy buenas elecciones, estoy seguro que será brillante en lo que se dedique señorita Weasley.

—Gracias, profesor.

La cena siguió tranquila hasta que el profesor invitó a algunas parejas a bailar a la pista, Lía estaba un poco apartada del resto viendo a las parejas bailar, una suave melodía sonaba, estaba por dejar su copa y retirarse cuando una mano se puso delante de Lía.

—¿Me permite un baile?

—Claro— tomó su mano y dejo que la guiará a la pista de baile— pero debo advertir que soy una pésima bailarina, me disculpo por tus pies de antemano.

—Estoy seguro que vale la pena, Lía— le dio una ligera sonrisa, el chico era guapo tenía una linda sonrisa, piel levemente morena, cabello castaño y unos lindos ojos castaños.

—Así que aurora— Asintió.

—Si, siempre he querido ayudar a las personas y he leído todo sobre la guerra mágica y como destrozo muchas familias mágica o muggles, quiero ayudar, evitar que se rompan más familias.

—Es una idea muy bonita— dijo colocando una mecha de pelo suelta detrás de su oreja, él acercamiento había provocado un leve sonrojo— yo igual he pensado en ser auror, al igual que magizoólogo.

—Es una carrera emocionante, eh escuchado que se viaja mucho.

—Así es, me gustaría recorrer el mundo mientras hago investigación.

El resto de la noche estuvieron bailando y charlando hasta que el baile acabó.

—Me permite acompañarla a su sala común Señorita.

—Claro, caballero— le siguió el juego, causando que soltara una leve risa.

En camino a su casa común fue tranquilo con Marcus caminaban con calma mientras iban charlando.

—Bueno llegamos, la dejó a salvo en las puertas de su sala común, espero que descanses.

—Si, igualmente, buenas noches Marcus.

—Buenas noches Lía.

Cruzó la puerta de su sala común después de pronunciar la clave bajo para que no la escuchara y se fue directo a su cuarto.

—¿Cómo te fue? Quiero detalles.

—¿Qué haces despierta aún?

—Esperarte obvio, quiero que me cuentes como fue todo.

—Estuvo bien— tomo su pijama de su baúl y se dirijo al baño a cambiarse— Estoy cansada, mañana es navidad hay te cuento todo.

Cristel asintió y se fue a la cama estaba cansada igual y mañana era navidad tenían que descansar.