𝐒𝐎 𝐖𝐇𝐀𝐓 || 𝐘𝐎𝐎𝐍𝐌𝐈𝐍

|| 𝟏𝟎

Y O O N G I 

Mi mente últimamente es un desastre. Hable con mi terapeuta luego de meses que no había tomado consulta. Las citas no eran programadas por mí, mi madre estaba detrás de todo, preocupada por mi salud mental más de lo que debería ser normal. Mi ansiedad había incrementado por una discrepancia que nació entre mi parte humana y lobo. En sí no era la persona más estable luego de los problemas con Hoseok, pero por más dolores de cabeza la psicóloga decía que había avanzado bastante, estaba más estable que antes. Podía comunicarme mejor y con el tiempo mis problemas de ansiedad mejorarían, a tal punto que no tendría que preocuparme de ella nunca más.

Aparte de ellos, una vez yo me queje sobre que no soportaba a Jimin por ser ruidoso y más parlanchín de lo que yo estaba acostumbrado. Sigue pareciéndome un niño que habla mucho y necesita estar teniendo a alguien a su costado, pero... lo extraño. Mala elección de palabras, mi lobo lo extraña de alguna manera. Jimin está pasando por su celo, lo sé porque luego de la charla que tuvimos la siguiente semana estuvo ocupado y rodeado de supresores; esta semana no vino. Seokjin se dispuso a llevarle los apuntes que tenía para que vaya y el lunes lo vi por unos segundos, había venido a entregarle algo a Jungkook para que se lo dé a Namjoon. Luego de ese día desapareció, aunque hablaba todo el día por un grupo que teníamos, quejándose de estar aburrido y no tener nada que hacer.

De una u otra manera... ambos terminamos hablando en privado. Fue porque yo envíe un mensaje algo seco y él me respondió por mi privado por el miedo de poder decir algo fuera de tono. Yo al inicio no quise hacerle mucho hincapié a todo, era algo extraño. Segundos después noté que él buscaba hacerme charla y distraerse. No soy bueno con las palabras, pero cuando de pronto me pregunto si podíamos hacer una llamada olvido como es que accedí. Su voz se oía diferente, era más pesada, pero no se escuchaba mal, era adictivo o al menos a mi lobo le gusto. Era como si le agradara escucha a Jimin.

Fue una linda charla de tres horas.

Durante la llamada él hablaba la mayoría del tiempo, parecía tener un tema para todo, aunque de vez en cuando se desvié, era extraño. Respondía cuando me veía obligado a hacerlo; más que nada le encontré cierto gusto a estar escuchando sus palabras por largo rato. Me hablo de su celo, de cómo se sentía y el pequeño dolor que golpeaba la zona del abdomen. El calor que lo dominaba ese día no era tanto, aunque era mejor si podía distraerse, por eso me llamaba. También comento que posiblemente al día siguiente no recibiría noticias de él porque prefería cederle el paso a su lado animal para que su libido no lo afecte.

Escuchar a Park hablar de su dolor por el celo era extraño, parecía no importarle. Todos los omegas con los que había tenido comunicación solían ignorar esos asuntos y cuando eran tocados buscaban cualquier manera de hacer como si no existiera. Según ellos era algo demasiado incómodo y vergonzoso, creían que cualquiera voltearía a verlos de una manera no muy positiva por imaginarlos en situaciones algo privadas. Cuando le pregunte a Jimin sobre porque le importaba tan poco que haya la posibilidad de que lo imagine en una situación comprometedora él dijo "Porque sé que no me imaginarías de esa manera, Yoonie"

Eran simples palabras que me llegaron sin aviso alguno. No supe que decir ni cómo reaccionar, lo mejor fue cambiar de punto.

¿Para qué me metí esa idea en la cabeza? No me gusto escuchar lo que vino después. Park me hizo una pregunta que había querido hacerme hace unos días, supongo que era lo mismo por lo que me busco esa vez en la tarde. Me pregunto si es que lo miraba como si se tratara de solo un estorbo, cuestiono si es que me molestaba su presencia o le incomodaba cuando se acercaba para hablarme del artista que nos gustaba.

Mi pecho dolió cuando escuche su voz. Su tono, joder, perdió esa energía que siempre tenía y pareció no poder pronunciar las cosas. Estábamos a distancia, pero podía imaginar que se quería hacer pequeño, como siempre lo trataba de hacer. No puedo explicar que es lo que sentí en ese momento, nada más puedo decir que algo dentro de mí ardió, como si pueda sentir lo mismo que él.