CAPÍTULO 16

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Aurora Ivera

Despierto boca abajo, entre sábanas rojas y oliendo al perfume del Boss. Una media sonrisa se asoma en mis labios al recordar lo de anoche y carajo, no puedo estar más feliz.

Pasé la mejor velada de mi vida, el mejor sexo y una maravillosa compañía. Jordan es entre muchos hombres, el único que sabe las caricias perfectas para mi cuerpo.

Suelto un suspiro poniéndome de pie. Largo las sábanas en el piso y veo la camisa que tenía puesta antes para colocarla sobre mi desnudez. No escucho ruido en la ducha, por lo que supongo está en el salón donde cenamos anoche

Y si, efectivamente está ahí, hablando por teléfono en su idioma natal. Me acerco por detrás rodeándolo con mis brazos y apoyando mi mejilla en su espalda desnuda.

—Buenos días. —susurro cuando finaliza la llamada y se gira para verme.

—Buen día.

Se inclina a besarme para después levantarme en brazos provocando que rodee sus caderas.

—¿Está todo bien? —inquiero al ver su ceño fruncido.

Niega.

—Anoche te iba a contar un par de cosas, pero no quería que arruinarán la velada. —comenta. —Dimitri y Celine son aliados de Azael, no sé desde cuándo pero lo son y yo me acabo de enterar hace dos días

Apoyo mi cabeza en su hombro dejando salir el aire que tenía retenido y vuelvo a verlo a los ojos.

—Tenemos que advertirle a Hunter, debemos de ponerlo en alerta por cualquier cosa. —le digo. —Azael es tan ruin que es capaz de utilizar a Ian. Dimitri y Celine me odian, así que también pueden intentar algo contra él.

Asiente.

—Si, estaba pensando en eso. —me baja tendiendome el teléfono. —Adviertele tu.

Busco en los contactos de Jordan el número del padre de mi hijo y llamo esperando que me responda.

—¿Si? —responde la voz del líder de la Mafia Negra del otro lado.

Me pasa un mano por el cabello.

—Soy Aurora. —susurro. — ¿Cómo está Ian?

—Está bien.

Me apoyo contra el ventanal.

—¿Lo estás viendo justo ahora? —pregunto con un nudo en el estómago.

Escucho pasos antes de que responda.

—Si, está con Nathalie en el jardín, cuidando de las gemelas. —contesta. —¿Por qué? ¿Pasa algo?

—La hermana del Boss, Celine, está con Azael. Tiene una alianza, ella y su esposo, así que ten mucho cuidado, redobla la seguridad de todos y…cuida de mi hijo. —le digo. —Tengo miedo de que Azael busque a Ian o intenté hacerle algo.

—Ese hijo de puta no le tocará un solo pelo a mi hijo.

Suspiro.

—Gracias, solo…te lo encargo mucho.

Se queda callado un momento.

—No tienes nada que agradecer, ¿Tú estás bien?

Asiento aunque no pueda verme.

—Lo estoy, te llamo luego, cuídense.

Cuelgo sin decir nada más. Ahora aunque se que no tengo de que preocuparme, lo haré, porque es mi hijo y debo hacer de todo con tal de garantizar su seguridad, la de ahora y la de un futuro.

Tentación Roja 2 ® Donde viven las historias. Descúbrelo ahora