Colección de 31 one shot y/o Drabble de contenido "Halloweenesco" o al menos con temática propia de Halloween con el Hyunlix como pareja principal.
-Historias con diversos tópicos y/o géneros según el tema correspondiente.
-Romance.
-Contenido +18
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Valiente... así le decían sus amigos que era cuando comentaba que pasaba a buscar a su novio todas las tardes para ir a sus prácticas de baile. No se lo decían porque el chico tuviera un carácter fiero y difícil de domar, era todo lo contrario, probablemente Felix era la persona más dulce que todos a su alrededor habían conocido, cálido, de sonrisa bonita y carita de ángel.
Llamaban valiente a Hyunjin por arriesgarse a adentrarse en la casa de su lindo novio, una tétrica tienda en donde vendían muñecas realistas las cuales eran confeccionadas por su abuela, quien era la única familiar del pequeño rubio. El azabache jamás había pasado de la entrada de aquella tienda, jamás había aceptado las invitaciones que el pecoso le hacía a su casa, Hyunjin no era valiente, solo estaba demasiado enamorado del chico de la casa de las muñecas.
—Si vas a poner cara de sufrimiento ya no deberías venir por mí. — dijo en forma de saludo para luego dejar un beso fugas en los labios de su novio. — Puedo ir solo hasta el estudio.
—No... — estuvo tentado en aceptar la oferta del menor pero no podía hacerle eso al pecoso. — La última vez que te fuiste solo casi te atacan esos chicos, no me lo perdonaría su algo te pasa por mi culpa.
—No es tu culpa que un montón de homosexuales de closet me ataquen por mostrarme tal cual soy, tienen envidia, eso es todo.
—Puede que tengas razón y no sean más que una bola de imbéciles inseguros y con pocas pelotas que atacan a un muchacho solo. Pero sigue siendo peligroso, Lix. — peino uno de los mechones rebeldes del rubio tras su oreja. — Puedo soportar unos minutos de terror pero asegurarme que iras y vendrás a salvo.
—Y esos minutos de terror pueden ser aguantados ¿pero dentro de mi casa? — sintió la mano del azabache tensarse contra la suya mientras evitaba su mirada simulando que el camino que recorrían todos los días era más interesante que los ojos interrogantes del menor. — Es increíble... ¿en verdad tienes miedo de mi casa?
—No lo tomes como algo personal. — hizo una mueca conflictuada porque no quería que Felix se sintiera mal. — Pero el primer piso de tu casa es una tienda de muñecas aterradoras... compréndeme.
—Pero a mi casa se tiene acceso por la escalera que está a un costado, solo debes entrar medio metro a la tienda y luego desviarte a las escaleras. — hizo un puchero. — no es que no me guste ir a tu casa, pero estoy seguro que tus padres deben estar hartos de mi presencia allí.
—Eso no...
—Hyunjin... sé que jamás lo dirán o puede que a ti no te digan nada, pero sé que es incómodo tener visitas casi todos los días, además estoy seguro que tu padre me tiene un poco de miedo porque piensa que mi abuela es bruja. — sonrió por aquello.
