Paso 3

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Capítulo 24: PEONÍAS.

Cass regresó de su viaje, cómo su regresó coincidió el mismo día de su descanso su plan era quedarse todo el día en casa.

Ella limpiaba la sala mientras veía la tele, apenas eran las 10 am, ella ya se encontraba activa en su día de descanso, hizo el desayuno, limpió su habitación, hizo apuntes y entrenó.

- Por qué me siento tan rara.. -Dijo mientras hacía estiramientos- Tengo un raro presentimiento.

Ella se espantó al escuchar el timbre de la casa, paqueteria no llegaba hoy, su padre no estaba aquí y su madre tampoco así que las visitas eran descartables.

El timbre sonaba una y otra vez de una manera desesperada, haciendo que ella bajara corriendo las escaleras.

- ¡Voy! ¡Voy! Cielos.. la casa no se irá volando.

Ella abrió la puerta, se sorprendió al ver un enorme ramo de flores enfrente de ella, el chico de la florería se las entregó junto con una caja de regalo y una nota.

- Pero...

X: ¿Señorita.. takami? Se las envía el joven midoriya -Le muestra un tablero- necesito su sello.

-Oh claro, un momento por favor..

Ella rápidamente dejó las flores y el regalo en la mesa, fue por el sello, firmó el recibo, él chico se fue y ella corrió a leer la carta.

- Pero.. -Saca su celular y marca a izuku pero este no contestaba- qué pasa.. -Dijo abriendo la carta-

"Hoy amanecí solo, el frío se sintió más de lo normal, era claro el por qué, la mujer que amo no estaba a mi lado.
Estar sin ti es una de las pesadillas más recurrentes que tengo y no me imagino el no tenerte a mi lado.
Estar acompañado de la mujer que me salvo es una de las cosas más asombrosa que me a pasado..
Desde que te vi, supe que te quería en mi vida, hemos pasado por tanto y tu fortaleza como tu belleza, no se desgasta.

Estás flores y este regalo son para la héroe más hermosa de este planeta, la mujer con la que quiero estar toda la vida.

Y si la vida me lo permite te amaré hasta el último aliento que me quede.

Atte: Midoriya izuku.

Pd: Te ves realmente hermosa con el puesto.. pasaré por ti a la 6:30 pm."


Ella abrió el regalo dejando ver el vestido negro con corte en V de la otra vez llevándose la mano a su cara.

-Realmente lo compró.. zuzu.

Ella marcó de nuevo a midoriya y este seguía sin contestar, todo esto lo sentía raro, izuku no suele ser así de detallista a menos de que haya hecho algo o en los aniversarios.
Pero está vez era diferente las flores eran diferentes, la carta se sentía con otros sentimientos.
Salió de sus pensamientos, llevó las flores al agua, guardó su vestido, buscó rápidamente con que acompañarlo, estuvo toda esa mañana pensando y releyendo la carta.

Salió de la casa de sus padres para ir a comprar cosas para la cena, pensaba dejar todo listo ya que a ella le tocaba cocinar..
El elevador se abrió en uno de los pisos dejando ver a su vecina que hace unas semanas había dado a luz..

- Ay.. por dios..

X: ¡Ah! ¡Vecina! Qué bueno verte, así puedo presentarte al pequeño Aoi.

Mi rara realidad 2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora