epilogo

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Me froto mis ojos con fuerza para poder acostumbrarme al sol que llega directamente sobre mi rostro, me siento sobre mi cama y el ruido proveniente de la cocina hace despertar mis alarmas, cuando estoy algo más despierta una pequeña suileta cubierta de arina llega a mi lado y doblo mi cabeza para examinarlo a la perfección.

- espero que sea harina Jack Jack. - me siento sobre la cama con los pies al suelo y tomo al pequeño entre mis brazos.

- fue idea de papi.

Me levanté de la cama con el pequeño agarrado de mis dedos y al salir de la habitación puedo ver a mi esposo batiendo una masa sobre la cocina mientras una pequeña está sentada sobre la cocina comiendo harina.

- espero que Mérida no esté comiendo tu experimento por qué te asesinare.

- oh has despertado. - deja la masa a un lado para saludarme con un beso - feliz cumpleaños pequeña luciérnaga.

- Aegan Cash los niños parecen todo menos niños que ha sucedido.

- papi dijo que te haría un pastel de cumpleaños mami feliz cumpleaños. - abrazo mis piernas con fuerza y lo tome en brazos.

- gracias mi amor.

- estás más que castigado señor Cash.

- eso es injusto, es por tu cumpleaños.

Solté una risa para luego volver a besarlo. La vida de casados con un Cash es un infierno. Han pasado varios años desde que me puso el anillo en el dedo frente a una iglesia y desde ahí todo ha Sido único y perfecto. Tenemos dos pequeños, Jack de cinco y Mérida me dos casi tres. Son unos pequeños diablos y junto al padre son el infierno total, pero no puedo negar que es lo mejor que me ha pasado en la vida, tengo la familia perfecta en medio del bosque. Aegan remodeló la cabaña para nuestra familia, vivimos aquí hace cuatro años, es como vivir en el campo y es una experiencia demasiado agradable sobre todo para los pequeños, adoran la naturaleza con su vida y cada árbol a nuestro alrededor tiene una lana y un cartel con sus nombres, se lo toman demasiado literal cuando digo que los árboles igual son seres vivos. Mientras tanto yo soy una directora de cine, he cumplido mis sueños sin necesitar a mi esposo, he hecho más de tres películas en los últimos años desde que me gradué, tengo la vida que siempre quise, soy mujer exitosa, mi esposo igual sigue siendo el mejor abogado de todos los tiempos y mis hijos son lo más hermoso que tengo.

Hoy es mi cumpleaños, hoy cumplí 30 años, estoy demasiado vieja ya, pero he hecho todo lo que me he propuesto y estoy orgullosa de aquello. Bañé a mis pequeños para poder tener nuestra comida afuera y al salir quedaron sucios igual, los odio pero de buena manera lo juro. Mis madres están feliz mente casadas y viviendo la vida que siempre quisieron, trabajaron hasta no más poder y ahora viajan por todo el mundo, mi refrigerador está lleno de imanes de los países que han recorrido,mis hijos adoran a aquellos imanes los cuidan demasiado que tenemos prohibido moverlos aunque sea un centimetro.

Jude y Susana siguen juntas, con la idea de adoptar un bebé pero cada vez que pasan tiempo con Mérida cuando anda con sus mañas se arrepienten al instante que prefieren los animales, una granja entre las dos les vendría bien, solo que ahora las dos trabajan en una pastelería demasiado linda y buena como para dejar aquellos planes por un bebé, aunque yo les hice ver aquella realidad de otra forma. Adrik es mi niñero, cada vez que puede estar pegado en la casa jugando con los niños, según el los odia, pero no es así, Mérida lo ama con su vida, el tío D es lo mejor que sus ojos pueden ver qué no se despeja de el hasta que el se sube a su auto. Aleix pronto se casara con Owen, han adoptado dos gemelos hermosos que se llevan perfecto con mis hijos, son lo más lindo que podrías ver en el día, luego de mis bebés claro.

Y mi esposo, le estaba saliendo canas, lo sigo molestando por aquello aunque yo luego pago las consecuencias.

- Anne trae platos - grito Adrik desde afuera.

Al llegar con los platos mi pequeña colgaba de las piernas de Adrik.

- podrías dejar de tratarla como un bicho, si llora te golpeare.

- tu hija es como una adolescente descubriendo un orgasmo por favor sacamela.

- no muerde hombre - aclaro Aegan - o bueno depende.

- odio a los niños - susurro Adrik mientras cargaba a mi hija en sus brazos y todos reímos.

- Aleix los gemelos n son suicidas deja de verlos de esa manera - reclamo con una sonrisa.

- y si se tiran al río o le tiran del pelo a Jack Jack, dios por qué a mí.

- eres demasiado paranoico - reclamo Jude. - si se ahogan te quitas un peso de encima.

- no ayudas.

- ve el lado bueno una carga menos - soltó Susy comiendo maní.

- estos niños de hoy en dia. - murmuró mi madre rodando sus ojos.

- dejen a los niños no se moverán de aquí, Jack Jack conoce las reglas.

Comimos todos como una familia mientras los niños corrían de un lugar a otro cada vez que venían por un pedazo de carne. Tenía todo lo que quería, lo que necesitaba y estaba feliz con eso, tengo mi familia luego de tanto sufrimiento por qué aprendí a no rendirme o a lo mejor debí rendirme cuando Aegan quiso un segundo hijo, a lo mejor no debí escucharlo, pero no me arrepiento de mi Mérida, ni mucho menos de Jack Jack los amo a los dos con la misma intensidad que amo a mi esposo de ojos grises y cuerpo tatuado, amo a mi Aegan Cash egocéntrico, amo su lado romántico y dramático, amo su rostro arrugado y su pelo canoso y lo seguiré amando tan fuerte como el primer día por qué aunque fuimos unos mentirosos pudimos cumplir nuestros sueños y vivir la vida de película que tanto quise o bueno el intento de película, sigo siendo una persona demasiado despistada que se me ha olvidado por completo que Jack Jack es alérgico al maní.

Que me lleve el diablo...

Éramos Dos Mentirosos  ~ Fanfic ~Donde viven las historias. Descúbrelo ahora