CAPÍTULO 30

109 19 320
                                    

EZRA

Las últimas horas han sido horribles. Acompañé a JJ a interponer una denuncia por desaparición. El teléfono de Naomi está completamente incomunicado, sin que sea posible rastrearlo, es como si hubiera desaparecido del mapa. Al igual que el mío. 

JJ fue extremadamente fuerte al lograr responder todas las preguntas con relativa calma, pero una vez que salimos del recinto policial, se desmoronó, arrodillándose en la calle, ocultando su rostro entre sus manos. Todo su cuerpo temblaba, y aunque yo estaba igual o peor, me senté a su lado, abrazándolo y asegurándole que todo estaría bien.

Sin embargo, las horas seguían transcurriendo y nada que lográramos obtener nuevas noticias.

Entramos al apartamento, JJ me permitió quedarme el tiempo que necesitara.

Lo escucho hablar con Melissa por teléfono, no entra en detalles, pero entrelíneas se entiende que algo malo le pasó a Naomi. Alcanzo a oír a Mel del otro lado, diciendo que estarían pronto aquí, y que se encargaría de preparar a Mike.

Pero nadie está preparado para recibir una noticia como esa. Cuando llegan, me destroza el alma.

—¿JJ? —Mike se ve deshecho. En todos los años que lo conozco, jamás lo había visto así, lo cual es entendible, se trata de una situación gravísima. Yo únicamente intento mantenerme estable porque no estoy solo. Pero en el instante que caiga la noche, dudo que pueda conciliar el sueño. Es mi mejor amiga, la persona que siempre le ha dado luz a mi vida—, ¿Dónde está? ¿Dónde está Naomi?

Me quedo en un rincón conteniendo el llanto, mientras Mike sigue preguntando una y otra vez ¿Dónde está Naomi? La busca por todo el apartamento, entrando a cada cuarto, como si aún no fuera capaz de procesar lo que está ocurriendo.

—¡Mike! —Mel lo ataja, sosteniéndole el rostro—. Naomi no está aquí, amor. No sabemos dónde está, pero la encontraremos.

Mike se queda absorto en Mel, sus ojos se llenan de lágrimas y rompe en llanto en tanto cae al suelo, y Mel intenta sostenerlo.

—Mike... perdóname, no pude cuidarla... —interviene JJ. Su voz sale tan ahogada.

—No fue tu culpa... no lo fue.... —murmura, su vista perdida. Luego, es como si escenarios perturbadores empezaran a cruzarse por su cabeza—, mi hermana... mi hermanita... Mel, prométeme que volverá, prométemelo, dime que lo crees.

Ambos siguen en el suelo. Las manos de Mike se aferran con fuerza a su ropa, como si fuera un niño buscando refugio.

—Volverá Mike, la traeremos de regreso. —Luego, se dirige a JJ—. Estará aquí otra vez, JJ.

Admiro su seguridad, pero es imposible mantener la calma. Pensar en el solo caso de que no regrese, me destruye, jamás volvería a ser el mismo. Es demasiado importante para mí, la adoro. Siempre ha sido mi amiga, mi hermana, mi madre. Amo cada parte de ella.

—Cancela todo Mel, cancela todo... lo lamento...

—Ssshhhh.... claro que cancelaremos todo. Yo también... estoy muy afectada Mike, quiero mucho a Naomi. Cancelaré todo, y llamaré a tus padres. ¿Está bien?

Mike asiente, cierra sus ojos descansando sobre su pecho. Solo un segundo, un segundo de descanso. En el fondo, todos sabemos que se vienen horas o días de terror.

Le pido a JJ su teléfono, para llamar a Dakota.

No me siento preparado para hablar con Fox o con mi hermana, prefiero que Dakota lo haga por mí. Sé que al llamarla, ella terminará avisándole a los demás. Decirle esas palabras, aunque sea por celular, me hace temblar, ¿cómo das una noticia tan preocupante?

EL SILENCIO ENTRE LOS DOSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora