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Capítulo 19

Selim acarició el cabello de Selimeye, la joven estaba recostada en su pecho, aquel era su mayor consuelo, Selim pasaba a su lado día y noche mientras que sus dos pequeños dormían aún lado de ellos.

Desde que había perdido a su bebé su relación con Selim había mejorado mucho, tal vez era por pena o lastima, pero se sentía amada y protegida.

—Todo mejorara, lo prometo - Selimeye asintió ante la promesa de su amado, ambos eran felices así, juntos..

Pronto los meses pasaron, meses atrás Dilşah había dado noticias sobre su embarazo y Nurbanu estaba a pocas meses de dar a luz, Selimeye logró mejorarse y ahora se hacía cargo de ambas concubinas.

Por ordenes de Süleyman se habían quedado en topkapi atendiendo algunos asuntos, así que luego de dos meses regresaban a Manisa.

—¿Esta todo listo Güven? Debes asegurarte de que Nurbanu vaya cómoda, Selim lo pidió- Güven rodo los ojos y asintió.

—Lo está, lleva el carruaje más grande y lleva más seguridad, ya se envió la carta al harén, todos lo saben ya, Dilsah debe de estar ansiosa por restregarlo en tu cara - Selimeye suspiro.

—Déjalo así, igual es algo que iba a pasar tarde o temprano - Güven negó y siguió ordenando sus cosas —Iré a despedirme  -tomó a Hümaşah en sus brazos y salió junto a otra criada.

Hürrem sultan la despidió con mirada de tristeza, amaba tener a Selimeye y a sus nietos ahí, era feliz, pero la joven tenía un deber.

—Protege muy bien a mis nietos y a ti, una mujer sedienta de poder es peligrosa  - Selimeye asintió y beso la mano de su sultana.

Al subir a su carruaje se despidió brevemente de Selim con un beso, Nurbanu rodo los ojos al verla y subió al carruaje no sin antes darle una mirada a su agha de confianza.

El camino fue tranquilo, Güven a su lado le cantaba a Mehmed el cual miraba a la joven criada con emoción, Hümaşah iba recostada en el vientre de  Selimeye y dormía tranquilamente, la tranquilidad siguió por algunas horas más hasta que en el otro carruaje un grito se escucho, el carruaje en el que viajaba se detuvo y los guardias se desplegaron con rapidez.

—¿Que esta pasando? - abrió ligeramente la ventana, un guardia se giro y le habló.

—Atacaron el carruaje de Nurbanu Kadin, ya dimos aviso al príncipe  - Selimeye tomó entre sus brazos a Hümaşah, era extraño que sólo el carruaje de Nurbanu fuera atacado, pero no dijo nada debido a que la conmoción seguía en el aire.

—Baja Selimeye - la voz de Selim la tranquilizo, habían pasado quince minutos desde que había ocurrido el atentado —¡Baja! - la joven brinco en su lugar y bajo rápidamente.

—¿Príncipe? - la cabeza de un hombre fue lanzada a sus pies, Selimeye se alejo visiblemente asustada y le tapo el rostro a Hümaşah.

—¿Explícame esto Selimeye? ¿Por qué este hombre aseguró que tú ordenaste atacar a Nurbanu? -ella abrió sus ojos con sorpresa.—¡Habla!

—No hice tal cosa, usted  me conoce bien- Selim la apunto con la espada, Selimeye sintió todo su mundo venirse abajo.

—El me dijo antes de asesinar a mi criada que tú se lo ordenaste -el rostro bañado en lágrimas de Nurbanu capto su atención  —Dijo; la sultana Selimeye le envía sus saludos - Selimeye miro rápidamente a Selim, el estaba furioso.

—¡Explícate!

—Eso no es verdad príncipe, no hice tal cosa, lo juro - Selim negó, Nurbanu soltó un sollozo y toco su vientre, la ira de Selim aumento al verla débil.

—¡Ella lleva en su vientre a mi hijo, un príncipe de esta dinastía! ¡tú una simple esclava intento hacerle daño! ¿¡Quién te crees que eres? - sus ojos se aguaron al escucharlo, se sintió sumamente herida y adolorida, se sintió tan lastimada.

—Soy Selimeye  - susurro—Selimeye sultan, su primera consorte y madre de su heredero y jamás le haría algo así.

Selim soltó a reír, la miro de mala manera.  —Estamos en medio de la nada, estas siendo una arrogante Selimeye, intentaste matar a un bebé de esta dinastía, te desconozco.

—Yo lo desconozco a usted.

—Te iras al palacio de lágrimas, regresa a Estambul y desaparece de mi vista - Selimeye abrió sus ojos.

—¿Me hará esto Selim? ¿Hará esta injusticia? ¿No buscará la verdad?

—Agradece que te estoy dejando con vida, Mehmed se quedará conmigo- ella abrió más sus ojos  —Puedes irte con Hümaşah.

—¡No puede alejarme de Mehmed! ¡Le harán daño! -sollozo con más fuerza —¡Selim piénselo!

—Tú eres la que le hara daño Selimeye - Nurbanu tomó del brazo a Selim, Selimeye tocó su pecho con fuerza y sin meditarlo fue arrastrada hasta el carruaje.

—Sultana - Güven la siguió.

—Cuida a Mehmed, cuídalo con tu vida. - Güven sollozo y se despidió de su sultana, son darle una mirada  a selim, Selimeye se fue con su dignidad y conciencia intacta.