Capítulo 24

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Selim miro la puerta con preocupación, las criada salían y entraban con toallas llenas de sangre y con cuencos de agua,  temía lo peor para su amada Selimeye

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Selim miro la puerta con preocupación, las criada salían y entraban con toallas llenas de sangre y con cuencos de agua,  temía lo peor para su amada Selimeye.

—Debes tranquilizarte Selim, Selimeye estará bien, es fuerte, Hürrem supo educar a una guerrera - la voz de Süleyman sonó calma ante los oídos de Selim, tener a su padre a su lado en aquel momento era lo que deseaba —Envie por tu madre, debe de llegar en un día.

—Gracias, a ella le gustará saber que mi madre vino a verla - Süleyman asintió, los gritos de Selimeye y las voces de las criadas se escucharon más altos.

Nurbanu miraba las puertas con enfado, la idea era hacerla perder al bebé, no hacer que diera a luz prontamente.

—Padre -hablo Selim cuando un llanto se escucho, el llanto era lo único que se escuchaba en aquellos aposentos, las doctoras y las criadas habían dejado de hablar y los gritos de Selimeye habían cesado.

—Paciencia hijo, deben asearlos -pero su voz fue callada debido a los gritos de Selimeye —¿Que esta pasando Kanfeda?

La kalfa sonrió hacia Selim y anunció un segundo bebé, Nurbanu palidecio al escuchar aquello, rezaba a los dioses que diera a luz a dos niñas o que los tres murieran durante ese período de tiempo, pero poco le duró el rezo cuando Kanfeda salió nuevamente y los dejó pasar.

La kalfa sonrió hacia Selim y anunció un segundo bebé, Nurbanu palidecio al escuchar aquello, rezaba a los dioses que diera a luz a dos niñas o que los tres murieran durante ese período de tiempo, pero poco le duró el rezo cuando Kanfeda salió nue...

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—Felicidades Selimeye  -dijo Süleyman con alegría, Güven le paso a uno de los bebé —Es una niña -anunció y Nurbanu suspiro aliviada —Su rostro es brillante y tiene poco cabello... tiene el cabello de mi amada Hürrem.

Nurbanu abrió su boca con sorpresa, Selimeye sonrió con orgullo y Selim se acercó a admirar a la bebé, el sultán tenía razón, la pequeña sultana tenía los cabellos rojos como él y su madre.

—Es un príncipe  -dijo Selim cargando a su hijo —Un hermoso príncipe y una sultana - Nurbanu miro con enfado a Selimeye, la odiaba grandemente.

—Allah nos dio dos bebé sanos y fuertes, Selimeye eres valiosa - la joven sonrió contenta— Su nombre será Kösem, la estrella que guía, espero guie a su hermano por el buen camino, que ambos se amen y sean fieles debotos de allah - todos soltaron un amen y le dio el bebé a Güven, Selim le paso al príncipe y miró sus ojos por un momento — Su nombre será Abdullah, espero que sea un fiel sirviente de Allah, que sea bueno con sus padres y amoroso con el pueblo.

𝑴𝑨𝑮𝑵𝑰𝑭𝑰𝑪𝑨| 𝑺𝑬𝑳𝑰𝑴 𝑰𝑰Donde viven las historias. Descúbrelo ahora