David paro el auto enfrente de un portón grande, un joven lo miro por una cabina y el portón todo grande, automáticamente se abrió.
David le agradeció.
Al abrirse el portón, se dejó ver una mansión, una casa sumamente grande, era de un tono blanco.
Es gigante, no miento.
-Espero y te sientas cómoda, está es tu casa.-Dijo Victoria mirándome.
-No queremos reemplazar a tus padres, no hay presión.-Dijo David.
-No hay presión cariño, queremos que te sientas como en tu casa.-
-Gracias por la paciencia.
-No agradezcas Kendall.-Término de decir Victoria.
Le sonreí.
Estaba a punto de abrir la puerta, cuando siento que la abren por mi, es un hombre no muy viejo, con un esmoquin puesto y una sonrisa. Le agradecí y el asintió con la cabeza.
Todos caminaron hacia la puerta de la casa.
(*-*)
-¡Bienvenida a tu nuevo hogar!.-Fue lo que gritaron un par de personas.
Mi cara de sorpresa fue simplemente una sonrisa, no quería que se notara tanto lo falso de mi sonrisa, supongo que lo hice bien.
Al entrar había una escalera en la derecha, y otra en la izquierda, en medio se lograba ver mucha gente en una espacio demasiado grande.
-Es la bienvenida que te organizo la familia, espero no sea una molestia.-Dijo Victoria.
No quiero ser mala, pero yo solamente quería pegarme un baño y dormir. Lo siento.
-No hay problema.-Sonreí.
-Mira te presento.-Dijo Cruz.
Y me presento a su familia, todos muy amables, me abrazaron, y me hicieron sentir bien.
(*-*)
A los que pude saludé, y me fui a sentar en un sillón alado de Romeo, quien me señalaba quien era quien, lo cual algunos reconocí. Muchos me miraban y me sonreían. Que amables.
La verdad que es una familia muy grande, no estaba acostumbrada a ver a tantos parientes juntos. Mis abuelos fallecieron, por parte de mi mamá y mi papá, y tíos tenía uno, que no era muy amable que digamos y era hija única aparte.
(*-*)
-¿Ya quieres conocer tu cuarto?-Me pregunto Romeo.
-Por favor.-Dije
Dicho eso me levante de donde estaba, y los seguí hacia las escaleras. Cruz iba detrás nuestro.
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-Te explicó, por si te pierdes..-Dijo Cruz.- Resumiendo todo, hay 15 habitaciones.
¿15? Me parece demasiado.
Llegamos a lo que era el segundo piso, habían tres pasillos. El que estaba en el medio, había una puerta, me explico Romeo que es el cuarto de sus padres.
Luego me mostraron lo que había en el pasillo de la derecha, habían cuatro habitaciones, en uno estaba el de Harper, el que le seguía era de Cruz, y los siguientes no era de nadie.
-Y esos se usan cuando viene alguien de visita.-Dijo Cruz.
Fuimos por el pasillo de la izquierda, habían otras 4 habitaciones, uno era de Brooklyn por lo que me dijeron, el que le seguía. Era mío.
Al abrir la puerta era una habitación sumamente grande, habían tonos blancos, grises y un par de negro. Me encanta.
Lo primero que se podía ver, era una cama, demasiado grande para una sola persona, con unas cuantas almohadas grandes blancas, el acolchado es de un tono blanco hermoso, había una manta polar de un gris encima de la casa, la cama parecía desordenada, pero se ve hermoso. Arriba de la cama había una cortina semi transparente blanca que pareciera que se caería pero era la ilusión con un par de luces de navidad pero las luces era blancas. La cama estaba rodeada de una alfombra gris, parecía peluche y El piso es de madera. Frente de la cama había un televisor adherido a la pared, el cual la habitación estaba toda de un color gris, y el techo negro.
Si uno lo escucha no hace buena combinación, pero si lo ve es hermoso.
A un costado había una ventana, con cortinas blancas. Después había otra "ventana" que si uno se acercaba era en realidad un balcón.
A un costado de lo que era la puerta principal de la habitación, había un escritorio, que tenía diseño de mármol, lo único que tenía era una Laptop, una lámpara de escritorio, un cuaderno mediado con tapa dura, y alado unos bolígrafos. Habían espacios libres que supongo yo había o tenía que rellenarlos. Y por lo cual habia una silla que se veía muy cómoda, con una manta de peluche negra.
Tan grande era la habitación, que con solo decirles que tenía otras 3 puertas adentro, les digo todo.
Ahí fue cuando cruz abrió una de las puertas, en ella había un baño, para mi sola.
El baño también es algo grande.
Al entrar, logro ver que de un costado había una bañera, y del otro lado una ducha. Había lo que es habitual, el inodoro como el bidet, muy modernos. Enfrente de ellos había un espejo sumamente grande. Para aclarar no me gustaría verme a la mañana haciendo mis cosas. Con un estante en los costado con productos que no tengo idea para qué sirven. El lavamanos estaba a lo largo que es el espejo. Y a un costado habían muchas toallas. De por si el baño tenía luces muy bonitas.
Podría vivir perfectamente en ese baño.
Salgo del mismo y me muestran lo que hay en otra de las puertas. Al entrar en un costado lo primero que vez al mirar hacia la izquierda es un espejo a cuerpo completo con franjas blancas, al girar hacia la derecha se puede ver un pasillo con el piso de madera, a los costados hay unos armarios en los dos lados, llegan hacia donde termina el "pasillo". Todo este armario es para mi. Lo que me traje llega a llenar ni uno de los armarios. Al final del pasillo, había un banquito blanco, el cual estaba enfrente de una mesa de maquillaje, con un espejo con luces en los costados, y por lo tanto maquillaje.
No podía creer que todo esto era para mi. Es demasiado.
Salgo boquiabierta de ese cuarto, y volvimos a mi habitación.
-Y por último está puerta.-Dijo Romeo.- Pero esa te la mostrará mamá.
Yo solamente asentí, ya es demasiado.
-Ahora descansa aquí, antes que te vuelvan a buscar.-Dijo cruz. Y se fueron
