SERENDIPIA [TOMMY SHELBY]

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Ya habían pasado dos días desde que Polly se había ido a la capital, desde entonces Esme y Kate habían desarrollado una rutina. A primera hora de la mañana Kate entraba a trabajar en la casa de apuestas junto a los Shelby mayores. Tommy había aprendido en una sola tarde que era eficiente y trabajaba rápido, más rápido de lo que estaba acostumbrado, por ello le daba más trabajo del que esperaba que acabase pero siempre se sorprendía cuando al final del día aparecía sobre su mesa, terminado. Y unas horas antes de la hora de la comida, Esme aparecía por la puerta del número 6 de Watery Lane con los niños tras ella y Finn aparecía después del colegio mientras ellas preparaban la comida.

Ese día su rutina había tomado una dirección ligeramente diferente a la habitual, al parecer Elijah tuvo cólicos esa noche y Esme llegó con unas ojeras tan oscuras que Kate dudaba que hubiese podido pegar ojo una tres horas enteras en toda la noche. Además, por sus muecas estaba claro que intentaba ocultar su dolor de cabeza pero este solo empeoraba con los gritos de los niños. Kate había insistido en que se llevara al mas pequeño, que por fin había conciliado el sueño, a la antigua habitación de su esposo para dormir una siesta, por supuesto Esme no dudó en aceptar la oferta.

En el momento en el que se quedó a solas con ellos se arrepintió de ofrecerse como niñera, los hijos de John no eran los críos adecuados que cuidar para alguien sin experiencia. Kate sabía que las cosas no serían fáciles para ella esa mañana así que decidió priorizar que los niños estuvieran a salvo, dejando para más tarde su preocupación por el desastre que pudieran causar, pero no pensó que las cosas escalarían tan rápido.

Cuando Finn entró por la puerta principal de la casa parecía que un huracán había pasado directamente por su salón, decidió no mencionar nada al respecto y la buscó con la mirada. Era el único de los menores que sabían la verdad sobre ella pero que viniera del futuro parecía que le impresionaba menos que saber que podía contra su hermano mayor. Cada vez que estaban en una misma habitación la seguía con la mirada esperando que hiciera algo, que lanzara algo o atacara a alguien, a Kate le divertía ver sus reacciones y en ocasiones cuando sabía que la estaba observando hacía algún movimiento brusco para asustarlo.