SERENDIPIA [TOMMY SHELBY]

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Después del discurso de Tommy no pasó mucho tiempo hasta que se disolvió la reunión, ese era el efecto de Thomas Shelby, era capaz de hacer llegar su mensaje incluso dentro de las cabezas más duras. Su único problema ahora era que, aunque sus hermanos aceptaran sus términos sin más preguntas, Polly no haría lo mismo y podía notar su enfado mientras lo perseguía en dirección hacia su despacho.

- ¿Mañana? Soy la tesorera de la empresa, deberías hablar conmigo antes. Mañana es el trofeo de Newmarket, el tercer día más movido del año. - continuo con sus razones Polly, sentándose en su silla de trabajo habitual mientras revisa el trabajo que había hecho Kate esa misma tarde.

- Hay 18 empleados. - trató de razonar Tommy, pero sin ponerle mucho interés a la conversación ya que seguía intentando abrir la caja fuerte.

- ¿A quién confiarías 200 libras? Ah... he cambiado la combinación. - terminó por confesar con una sonrisa al escuchar a Tommy suspirar con pesadez, sus brazos ahora apoyados sobre la caja. - A ver, ¿qué ha pasado, Thomas? ¿A quién has visto en el Black Lion?

- Dime la combinación, Polly. - su tía decidió permanecer en silencio, centrando toda su atención en el libro de cuentas frente a ella hasta que ella recibiera sus propias respuestas. - Polly, dame la combinación. - la presionó, con las manos sobre su escritorio, pero ella siguió ignorándolo así que tomó su ultima opción para conseguir lo que quería, ceder. - Lo que sucedió en el pub ha sido cosa del IRA. En esta situación, por la seguridad de todos, es mejor que ciertas cosas no se sepan aún.

- ¿Y por qué mañana? - su tía siguió con el interrogatorio, ahora dandole toda su atención.

- Porque son las carreras de Newmarket. Todos los jefes de Londres estarán allí.

- ¿Y tu te presentas y tomas la ciudad? - preguntó Polly irónicamente ante la locura que sonaba el plan de su sobrino, algo así era de esperarse de Arthur o John, pero no de Tommy, por eso él era el jefe.

- No, tendré la oportunidad de mostrar nuestra mano. Las bandas judías y las italianas están en guerra desde hace seis meses. - explicó, dramatizando el periodo de tiempo con una voz ligeramente mas grave. - Los judíos están perdiendo, necesitan aliados.

- Sí, pero nosotros no. - Polly lo interrumpió pero él no le dio importancia y siguió hablando como si nada.

- Necesitamos un punto de entrada en la zona sur de Grand Union y los judíos controlan Camden Town.

Cuando terminó con su explicación todas esas piezas que parecían sueltas al principio cobraron forma. Lo que Tommy decía tenía sentido, no solo traería grandes beneficios económicos a la empresa sino que también ganarían en reputación, el nombre de Shelby Sociedad Limitada se oiría por todo Inglaterra si el plan tenía éxito.

Tommy Shelby siempre actuaba bajo los parámetros de un plan, sus movimientos eran delicados y precisos. Incluso cuando parecía que lo que hacía era una locura, sus allegados podían tener la certeza de que había una carta escondida bajo su manga.