∓ ) 𝘿𝙊𝙍𝙈 ♡ Hyunho.

13. Yeah, boyfriends.

En cuanto la puerta delantera fue abierta Minho tuvo la oportunidad de ver una vez más a la madre de Hwang Hyunjin; con su cabello negro y rostro prácticamente igual al de su único hijo (excepto la forma de su nariz), vestida casualmente pero conservando una elegancia característica de su propia persona, de mirada amorosa, obviamente una mujer hermosa dedicándoles aquél tipo de sonrisa que tan sólo una madre podría lograr, generando calidez en sus corazones. Los recuerdos que compartió con Hyunjin dentro de esa casa vinieron de inmediato, centrándose más que nada en la deliciosa comida que preparaban en aquella casa. Sintió su estómago rugir sin disimulo y una sonrisa avergonzada fue tapada por la mascarilla, pero sus orejas enrojecidas no pasaron desapercibidas.

—Bienvenido hijo. Minho-ssi, no hay necesidad de sentirse avergonzado, estaremos encantados de darte buena comida. Pasen. —Sonrió con calidez la mujer mientras veía a ambos muchachos, haciéndose a un lado dejó el camino despejado para que ambos entraran, Hyunjin detrás de Lee después de haberle hecho ir primero.

Una vez se encontraron quitándose sus zapatos y reemplazándolos por los de estar en casa, Minho se inclinó levemente con una sonrisa ya más relajada, ofreciendo sus respetos a la madre del chico que amaba. -Es un placer verla nuevamente, señora Hwang.

Por supuesto encantó a la mujer de mediana edad con su sonrisa encantadora y adorable al mismo tiempo. El efecto fue instantáneo, haciéndo a la mujer sonreír para demostrarle un "igualmente" con un gesto solemne, más su expresión cambió repentinamente y abrazó fuertemente a su único hijo desde dónde podía debido a su estatura. El chico le respondió el abrazo entre sonrisas y risitas, escena que Lee observaba cautivado por la vista de la felicidad de Hyunjin, más atrás el padre del mismo mirando a su familia reunirse. La presencia del hombre se hizo obvia para Minho, quien formó otra reverencia además de un saludo formal, este respondiendole de igual manera pese a la expresión de seriedad que le caracterizaba —sólo una máscara, Minho podía decir bajo los recuerdos del padre de Hyunjin siguiendoles las bromas y llevándoles a comer después del entrenamiento—.

Toda la situación se sentía como un gran deja-vu, intensificándose aún más en cuanto Hyunjin se separó de su madre y fue atacado por un energético cachorro no más grande que un gato, moviendo su cola frenéticamente ante la vista de su joven "hermano-dueño" nuevamente en casa después de tanto tiempo. Las risas se hicieron presentes de nuevo, el rubio tomando al can entre sus brazos para recibir las lamidas o "besos" del mismo sobre su piel.

Y nuevamente Minho se derritió, sin poder evitar la pequeña risa enternecida desde su garganta al ver al chico interactuar de esa manera con su mascota.

De esa manera se ganó la atención tanto de los Hwang como de Kkami, quien comenzó a ladrarle emocionado, moviendo su cola e intentando saltar-no realmente- de su dueño para poder llegar al nuevo invitado.

—Pensé que yo no le gustaba... —Rió Minho, teniendo dos minutos después al cachorro revoloteando entre las piernas de ambos completamente eufórico de verlos después de tanto tiempo. El mayor de ambos jóvenes se inclinó para rascar con cuidado detrás de las orejas al pequeño animal, riendo de manera adorable en cuanto este le seguía el juego. Probablemente Hyunjin tendría que sentirse ofendido de ver como Kkami parecía entretenerse tanto con su hyung, pero la escena estaba derritiendo su corazón, no sería capaz de fingir "indignación" aunque quisiera.

—Si te refieres a los ladridos... Kkami-ah es tímido, por eso suele ladrar mucho al principio, pero también lo hace cuando se emociona así que para ver su estado de ánimo fíjate en su cola. —Señaló el chico de cabello largo, ignorando por un momento el hecho de que sus padres los observaban como si se trataran de niños pequeños. Se inclinó de igual forma que el chico ahora castaño (el naranjo desteñido), acariciando a su cachorro y jugando con el mismo. —¿Ves? Si su cola se mueve significa que le gustas. También a veces rechaza tu amor porque quiere, cuando lo grabo nunca quiere ser cariñoso.