Eres mi globo favorito

Capitulo 5

Llegaron a las afueras del pueblo, el estacionó el auto mirándola.

—Prefiero que me esperes aquí, tal vez aceptas mi verdadera forma de payaso pero no quiero aún que me veas comiendo –mencionó mirándola.

—Claro Penny, no quiero incomodarte, yo te espero aquí –sonrió. —Anda, ve así ya vamos a casa –mencionó sonriendo besando la mejilla del contrario.

—Gracias princesa –acarició su mejilla y se cambió a su verdadera forma. —Te veo en unos minutos –mencionó para luego salir del auto para poco a poco perderse de vista en el trigo.

Ella pacientemente hizo el respaldo para atrás, saco un libro para empezar a leerlo con calma, estar allí la relajaba, escuchar el ruido que hacia el trigo por el aire era algo muy relajante, ver que alrededor no había nadie, ver tantos árboles era muy hermoso, aceptaba que estar en ese lugar era más relajante que estar en la ciudad, había tanto ruido, tanta gente, tanto desorden.

También si no se hubiera mudado aquí, no hubiera conocido a Pennywise y en toda su vida además de sus padres que recordaba vagamente, el es de las pocas personas que la han tratado bien en su vida, eso la hacia feliz, conocer a una persona que tal vez era un monstruo para otros, para ella era alguien especial.

—Listo mi princesa –mencionó limpiandose la boca ya en su forma humana. —Te aburriste? –la miro.

—De hecho no –mencionó. —Me gusto estar aquí, me gusto el silencio, este lugar transmite mucha paz –sonrió. —Te puedo hacer una pregunta Penny?

—Claro querida, dime –la miro ya con su boca limpia.

—Has tenido novia? –lo miro curiosa esperando su respuesta.

Desvío la mirada y chasqueo la lengua.

—La verdad no preciosa, no he tenido ya que todos me tienen miedo y les parezco detestable –mencionó mirándola. —Hasta que llegaste tu –sonrió.

—Solo no te juzgue por tu apariencia –sonrió. —La verdad es que eres alguien muy atractivo penny, lastimaste que no hayas tenido novia –mencionó.

—Supongo, pero en fin, por que la pregunta linda? –la miro atento.

—Simplemente curiosidad, si otra persona te viera pensaría que has tenido muchas novias –exclamó.

—Se equivocarian bastante –mencionó riendo levemente. —No he tenido ni una sola, tu has tenido novio? –la miro.

—Solo uno, pero fue un patán así que lo deje –mencionó.

—Que mal, lo bueno es que te libras te de el –chasqueo la lengua.

—Exacto –dijo riendo levemente.

—Ya vamos a casa? –la miro a lo cual asintió sonriendo. —Bien, pues andando entonces –sonrió arrancando y empezó a manejar camino a la casa que ya era donde ambos vivían.

Tiempo después llegaron a casa, sacaron las llaves para abrir, una vez ya abierto entraron ambos.

—Agua? –le preguntó mirándolo.

—Si por favor –respondió sonriendo quitándose la chaqueta y dejándola en el perchero. —Linda, que más te dijeron esos chicos de la salida de la escuela?

—Quienes? Ah! Los chicos, sus nombres son Bill, Richie, Stanley y Eddie –mencionó dándole su vaso de agua. —Ellos que?

—Que más te dijeron?, es que note que uno no paraba de mirarme –mencionó mirandola.

—Me preguntaron que quien eras tu, que de donde eres, prácticamente me empezaron a interrogar sobre ti, no les dije tu nombre, solo les dije que te acabas de mudar –mencionó.

—Hiciste bien en decirme linda, aunque no me gusta que las personas se estén metiendo en mis asuntos –mencionó chasqueando la lengua.

—Tranquilo, no les diré nada sobre ti, además no tienen ningún derecho en meterse en mis cosas y entre esas cosas, estas tu –mencionó sentándose a su lado en el sofá.

—Valla que eres única ___________, tu eres una en un millón –sonrió besando su frente. —Que te parece si el sábado vamos al cine? –la miro.

—El sábado?... Tengo planes con los chicos ese día... –lo miro. —Les puedo cancelar, además, se que le gusto a dos de ellos, va a ser muy incómodo –mencionó sonriendo.

—Les gustas a dos de ellos? –pregunto celoso. —Bien, entonces tenemos una cita el sábado –sonrió al escuchar lo que dijo.

—Ci-cita?! –grito sorprendida sintiendo sus mejillas arder.

—Te ves más hermosa sonrojada –soltó una risa leve sonriendo al ver esa imagen de _________. —Y si, cita, solo tu y yo preciosa –sonrió.

—Esta bien –sonrió. —Solo tu y yo el sábado me parece una gran idea –mencionó sonriendo.

Así paso el resto del día, se la pasaron platicando sobre su vida, sobre anécdotas embarazosas, Pennywise le ayudó con la tarea de álgebra, vieron una película romántica, se molestaron un poco, para otras personas la cita ya estaba pasando pero ellos no se daban cuenta, se llevaban muy bien, pensaban que eso era normal y si lo es pero hay demasiada química entre ellos como para ser "solo amigos", tenían muchas cosas en común.

—Preciosa, hey, despierta –susurro moviendo el brazo de ___________. —Hey, linda, despierta, ya es otro día –sonrió al ver que un no despertaba.

—Eh? Que pasa Pennywise? –habló con los ojos un cerrados.

—Ya no soy Penny? –sonrio ante tal imagen pero sin poder evitar hacer puchero. —Despierta, ya es otro día, nos quedamos dormidos otra vez en el sillón

—Si seguimos así, me voy a quedar sin espalda –dijo riendo.

—Ya te llevaré a la cama a la otra –sonrió. —Quieres desayunar?

—Uy si, me muero de hambre –mencionó riendo.

—Pues vamos –dijo riendo cargandola de costal en un hombro llevándola a la cocina.

—Penny! –grito riendo mientras pataleaba. —Oye! –grito sin dejar de reír.

—Ya preciosa, ya llegamos –sonrió dejándola en la silla. —A desayunar –revolvió su cabello y empezó a cocinar.

—Si –mencionó emocionada mirándolo cocinar. —Que vas a preparar?

—Wa-ffles –mencionó haciendo una pausa.

—¡¿WAFFLES?! –grito emocionada.

Término de cocinar uno deliciosos Waffles que olian muy rico, soltaban un olor de moras y vainilla, simplemente lo miro sorprendida sintiendo su estómago gruñir por ese delicioso olor.

—Huele muy bien –cuando le dio el plato dio un bocado sonriendo de oreja a oreja. —Esto es delicioso Penny!

—Me alegra que te guste princesa –sonrió mirándola comer. —Preciosa, tengo que ir a comer....

—Penny, a fuerza debes de comer carne con miedo? –mencionó mirándolo.

—Lo que me mantiene vivo es el miedo, la carne es un premio –mencionó.

—Entiendo, ve con cuidado –exclamó mirándolo. —Te espero aquí Penny –beso su mejilla.

—Claro preciosa, llegare a tiempo para dejarte en la escuela –beso su mejilla y salió de la casa.