La herencia del dragón | Completa

El nacimiento de una princesa

Después de lo que Stelle le había contado a Patrick ambos habían tomado muchas precauciones en su vida y sobre todo después de descubrir que Stelle se encontraba esperando un bebé.

Stelle no quería arriesgar a su hija no quería que su padre las encontrará.

—Te amo princesa —susurro Patrick sobre el abultado vientre de Stelle.

—Ella también te ama.

—Claro que me ama, ella será la princesa de papá —dijo sonriendo.

—Princesa —susurro meditando—, princesa, ese será su nombre justo como Sally, justo como la princesa que fue mi madre.

—Sally —murmuró Patrick—, Sally Jackson... me encanta como suena.

—Mi dulce princesa, mi pequeña Sally.

***MESES DESPUÉS***

—Es hermosa, no me canso de mirarla —exclamó Patrick mientras observaba a su pequeña hija.

—Si, definitivamente es hermosa.

La pequeña Sally había heredado los enigmáticos y cambiantes ojos azules de su madre mientras que sus rizos chocolates eran la mezcla perfecta entre el cabello azabache de su padre y el pelirrojo de su madre.

Sally era una bebé adorable, una niña que sin duda al crecer se convertiría en una hermosa mujer.

—Es una suerte que mi princesa haya sido una niña o de lo contrario se convertiría en el objetivo de mi padre.

—Hablando de tu padre hay algo que me preocupa.

—¿Qué pasa? ¿qué es lo que te preocupa?

—Pues Sally es más parecida a ti que a mí y me preocupa que tanto a heredado de ti —dijo sin explicar claramente su duda.

—Si lo que te preocupa es el vampirismo recuerda que yo solo soy mitad vampiro y ella también es tu hija y tu eres completamente mortal. Hay muy poco del gen vampiro en ella, lo más probable es que sea más mortal que vampiro.

—Me alegra escuchar eso.

***5 AÑOS DESPUÉS***

—¿A dónde vamos? —pregunto la pequeña niña mientras miraba con detenimiento a sus padres.

—Vamos a casa de mi hermano, Joel —le respondió Patrick mientras observaba a su alrededor con nerviosismos.

—¿Por qué? al tío Joel no le agradan los niños.

—No digas eso princesa —susurró Stelle al llegar a su destino.

Al bajar del auto y llegar a casa de Joel Jackson, Sally esperó a sus padres mientras hablaban con su amargo tío.

—Por favor hermano tienes que ayudarnos sabes que no tengo otra opción.

—No Patrick, sabes que no me agradan los niños por algo no tengo hijos y ahora tú quieres que me haga cargo de tu hija.

—Solo serán dos meses Joel, por favor no tenemos otra opción.

Después de casi media hora de discusión Joel finalmente, aceptó cuidar de Sally mientras Patrick y Stelle perdían el rastro de los vampiros que los perseguían aunque de esto último el mayor de los hermanos Jackson no tenía conocimiento alguno.

—Te amamos mucho, princesa.

—No lo olvides, pronto regresaremos por ti.

Esa tarde Sally y Joel vieron partir a Patrick y Stelle sin imaginar que esa sería la última vez que los verían con vida.

Solo tres semanas después Joel recibió la fatídica noticia de la muerte de su hermano y su esposa aunque este jamás supo que la verdadera causa de sus muertes fueron un grupo de vampiros que habían tomado venganza contra la única hija de Vlad Tepes... Venganza contra la traidora hija de Drácula que había osado enamorarse de un mortal.