Capítulo 36

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Pov Lizzie

Después de nuestra sesión de anoche yo estaba exhausta, pero decidí levantarme temprano para hacer el desayuno y así recompensar un poco a T/N por todo lo que había hecho por mi el día de ayer.

Desde el vestido, la cena, la pedida y bueno el gran sexo que tuvimos.

Tomé su camisa y me la puse, fui directo a la cocina y empecé a buscar ingredientes.

Comencé a preparar la comida, coloqué un poco de música en un volumen considerable.

Sentí unas manos en mi cintura y al principio me exalté pero al saber quien era relajé mi cuerpo, el agarre de T/N era bastante fuerte.

- Buenos días hermosa - me dijo con su voz rasposa

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- Buenos días hermosa - me dijo con su voz rasposa

- Hola, ¿Qué tal dormiste? -

- Muy bien - me daba pequeños besos en mi cuello - ¿Y tú? -

- Yo bien...aunque estoy un poco adolorida - comenté riendo - Anoche estuvo fantástico pero creo que fue demasiado para mí -

- ¿Fuí demasiado ruda? - comentaba preocupada

- para nada, sabes que me encanta cuando lo hacemos así, solo que fueron demasiadas veces -

- En ese caso - sentí como me cargaba y me llevaba al sofá - deberías descansar y yo terminaré el desayuno, pon alguna película o algo  -

- ¿Enserio tienes energía? Bueno más bien ¿Cómo es que tienes tanta condición? Anoche te movías muy bien y rápido.... - comenté riendo un poco

- Bueno digamos que el ejercicio me ha ayudado pero en definitiva tu eres mejor que el cardio - me guiñó y se fue en dirección a la cocina, sonreí como una boba.

Por fin en mi vida estaba pasando algo demasiado bueno, pronto me casaré con la persona de quien estoy realmente enamorada, tendré un hijo de esa persona y nos mudaremos juntas.

T/N tardó unos minutos más en terminar el desayuno, le había tomado la palabra de descansar pues en realidad me sentía super cansada.

- Amor, ya está listo - escuché a T/N llamarme - Te quedaste dormida en el sofá - me decía riendo un poco

- Lo sé, me siento cansada -

- ¿Y por qué te despertaste temprano para hacer el desayuno? Te hubieras quedado en la cama -

- Lo sé pero quería sorprenderte y recompensar un poco todo lo que hiciste por mi ayer -

- No tienes que recompensar nada, me dijiste que si te querías casar conmigo, eso es más que suficiente -

- Te amo demasiado, eres demasiado para mí -

- ¿Hablas enserio? - reía - ¿Te haz visto en un espejo? Tú Elizabeth Chase Olsen eres la mujer perfecta y jamás me cansaré de recordartelo - se acercó a mi y me dio un tierno beso. - Vamos que el desayuno se enfría -

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