8- Las reglas de rompen

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Vetado.

Esa palabra tiene un significado en específico.

Pero en el momento en que salió de los labios de Dean entendí que los peores presagios comenzaban a llamar a nuestra puerta.

Verán...

Con Queens vetada del exterior perdíamos la ayuda del gobierno, vamos, que una de las cosas más graves que sucedería es...

Bueno entre otras cosas el estado dejaría se invertir en los proyectos que se estaban ejecutando en la actualidad.

Por ejemplo, el que más le molestaba a Dean era el de las prácticas de agentes de otros estados del país en nuestra cede local. Ese proyecto era suyo, el lo propuso y batalló muchísimo para que lo admitieran y ahora de la nada quedó completamente cancelado.

Entiendo que tenga encima tanta ira.

Yo estaría reventando paredes si me pasara algo así.

—¿Que fue lo que pasó exactamente para que tomarán esa medida Dean?—pregunta Trevor, el primero en hablar desde que nos enteramos de la noticia.

Los otros tres seres que estábamos en la habitación teníamos encima un silencio increíble.

Pareciera que todos estabamos calculando las cosas que perderíamos al pasar eso.

Dean respiró hondo y dijo:

—El que me llamó fue el alcalde—comienza a explicar- me soltó la noticia derrepente joder—dice frustrado.

«El día que me reuní con el ya habíamos tocado está posibilidad, pero jamás pensé que llegaría a aplicarla—se cubrió el rostro con las Palmas de sus manos.

—Pero...—comenzó Mar confusa—entonces por qué decidió de la noche a la mañana tomar esa medida.

Dean nos miró para luego decir...

—Entre ayer en la noche, y hoy en la mañana—hizo una pequeña pausa, como si no tuviera la suficiente fuerza para proseguir—hay más de cien perdidas en la ciudad.

Toma ya.

No puede ser...

—¿Cómo?—logré decir luego de unos minutos de el horrible silencio que se extendió en la sala.

—Hubieron tres edificios que explotaron a media madrugada—suspiro y dijo lo próximo con la vista fija en mí—y se reportaron más de diez accidentes automovilísticos.

«Todos en las fronteras de la ciudad—agregó al final.

Entonces algo pasó por mi mente.

No estarás pensando en que esa estupidez funcionará para algo cierto.

Bueno, lo que estoy pensando servirá para mucho la verdad, sólo necesito el permiso de...

Eso no Emma, lo otro, eso que planeas hacer sin consultarlo con Dean.

Ah eso, pues no se si ayude en algo pero debo gastar todas mis opciones.

Dejemos la parte de "estas loca, esto no es una película de ciencia ficción" de lado por un segundo y enfoquemosnos en lo de que no se lo dirás a el que según tu era el experto en estos asuntos.

Oye ¿qué quieres? el no me dejará hacerlo porque piensa que no funcionará para nada.

No lo culpo la verdad...

¿Sabes que? se acabó, hablar contigo es una pérdida de tiempo.

—Dean—dije su nombre atrayendo su atención—necesito que hables con el alcalde, tomes todos los detalles de como serán las cosas a partir de ahora y necesito que sea ya.

A veces Donde viven las historias. Descúbrelo ahora