Capítulo 14: Serás Mis Ojos

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Pasaron al rededor de diez horas cuando finalmente la doctora Christine Palmer junto a un conocido, salieron a dar información sobre el estado de la niña.

—¿Capitán Rogers?–dijo la conocida voz —No esperaba verlo por aquí.

—¿Cómo está ella?—dijo angustiado.

—Está estable —dijo la doctora —Ha salido de peligro, ahora se está recuperando. La pasaremos a piso en unas horas.

La angustia que todos estaban sufriendo se disipó de una manera considerable.

—Ella estará bien —dijo Sam —Es fuerte.

—Lo es sin duda alguna —respondió Strange —Sin embargo me temo que no todo son buenas noticias, una parte del cerebro fue dañada por la bala y hasta que no despierte no podremos saber que salió perjudicado.

La sonrisa de todos se borro, al escuchar esto.

—¿Cómo dijiste que era?—preguntó el soldado de invierno.

Wanda quedó de piedra al escuchar su voz tan áspera.

—¡RESPONDE MAXIMOFF!

—¡No sé!—grito asustada —Era de cabellera rubia, ojos verdes y traía un chaleco.

—Belova —respondió el soldado, con la descripción que la castaña le había proporcionado ya sabía a dónde dirigirse. —Voy a matarla.

—Hey, hey detente ahí Buck —dijo Sam. —No hagas algo de lo que después puedas arrepentirte.

—No, esto definitivamente no es algo de lo que me pueda arrepentir —dijo —¡Quítate Wilson!

—Por favor no lo hagas —pedía Wanda —Se que debemos hacer justicia, pero espera un poco.

—¡Muevanse!—grito.

—Por favor no me obligues a hacer esto —dijo —No deseo lastimarse.

La tensión se podía sentir entre los tres.

—¡Ya cierren la maldita boca!—grito Rogers —Es un jodido hospital, nadie va a ir a ningún lado hasta que yo no lo ordene. ¡Y más les vale que me hagan caso!

James miró asombrado como su padre logró hacerlos no discutir más.

Los tres no dijeron más, el ver asi a su capitán hacia que temblaran de terror, ya que siempre se caracterizaba por ser alguien tranquilo.

Un portal se abrió detrás de ellos.

—Disculpen —dijo haciendo que todos se asustaran.

—¡¿Tiene que hacerlo cada vez que aparece?!—grito Wanda detrás de Bucky.

—Lo siento, me he acostumbrado más de lo habitual. Las artes místicas te cambian la vida. —dijo —Cómo sea, vengo a informarles que la niña ya está en piso. No tardará en despertar

—¿Podemos verla?—preguntó James.

—Dada las políticas del hospital, sólo puede ingresar uno —informó.

—Strange siempre siendo tan moderado —contestó Christine —¿Por qué no pasan los dos?

—Oye te recuerdo que cero niños —replicó este.

—No seas amargado y deja que el niño vea a su hermanita, tomaré responsabilidad de ello más tarde.

El doctor miró con mala cara a su acompañante, para después con un chasquido de dedos señalar que se metieran al círculo mágico.

Reparar los errores del pasado (The Avengers) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora