53

20 1 0
                                    

>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>

"¡¡¡Todas ustedes serán castigados!!!"
"¡¡¡Pecadores!!!".

- ¡¿Ahck!? -

Se despertó de golpe, asiendo que en la cama que estaba rebotará un poco más. Sudando frío se sentó en la cama sintiendo su cuerpo adormecido, eso lo extraño un poco, pero luego recordo algo más importante.

- mi cabeza¿está en su lugar?-

Se preguntó sorprendió, poniendo con total control sus manos en su cara, sintiendo las facciones de ella  y asegurando si certeza de su cabeza estaba en su lugar.

- ¿Cómo?...

Se volvió a preguntar el albino, pronto noto el lugar donde estaba. Con sopresa examinó el lugar y noto de inmediato que era su cuarto, otra vez la intriga de apoderó de su mente, tenía ciertas preguntas en su cabeza, pero eso no era lo más importante.

- ¿Uchiha?¿A dónde se metió?... maldición...- susurro después de un suspiro pesado, miro en dirección ala puerta y vio que estaba abierta.

-¿Habrá Sido el? - se volvió a preguntar, frunciendo el ceño- rayos, sabe muy bien que no puede llamar a nadie,el no sabía muy el lugar donde fuimos¿Cómo supe por dónde regresar?.

- ¡Maldita sea!¡¿Lo habrá echo!?.

Maldijo. Marcho con caminata asia la puerta, después de poder pararse de la cama. Al principio sintió un gran mareo, sabía que era normal, por unos segundos se quedó tieso con las ojos serrados en su lugar, consiguiendo al abrirlos no estar tan mareado. Ya estaba apunto de pasar por la puerta, la preocupación de que el uchiha habría llamado a alguien ala casa era arriesgado y el lo sabía. Estaba preparado para al salir del cuarto regañar y reclamar al uchiha con todas su fuerza sin importar quien estubiera.

- mierda - susurro el albino - si lo hizo ¡me va a oír!¡Me va a oír-....

Hidan paro en seco Serca de la puerta,sintió algo punzante recorrer toda su espalda que provocó al rato que hidan se retorciera y se sostiene ra del marco de la puerta.

- jashim-sama¡¿Que es esto!?, ¡¿Ahck!? .

Se preguntó,las punzadas en su espalda se asían quedaba vez más fuertes, y se asían más frecuente en dos sitios de su espalda. Causo que hidan sintiera un leve mareo y unas ganas de vomitar, pero se las aguanto y se quedó por unos momentos en su sitio.

- m-muerac-ce quien sea que me cosió¡Maldita sea!.

Reprochaba en su lugar. Paso un rato y hidan sintió las punzadas con poco intensidad, al sentirlo se incorporó despacio, soltó un suspiro pesado de nuevo. Con cuidado paso uno de sus brazos al rededor de su cuello, tocando y sintiendo los puntos que le avían echo para poner su cabeza, una que otra salida, pero asia que si cabeza estubiera en su lugar. Volvió a suspirar, guiando su brazo asta tocar su espalda. Pero de repente recordó algo al sentir un punto en específico en su espalda.

AMOR DE DOS "LOCOS" (OBITO X HIDAN)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora