Mi fuerza

Lo que quieras

Al día siguiente comenzaron muy temprano en la mañana con las grabaciones de las escenas correspondientes a filmar en aquella ocasión.

Andrés y Aracely habían sido los primeros en llegar... Cada uno por su lado, claramente, pero no perdieron tiempo en quedarse charlando como lo hacían normalmente.

Era por ese motivo que siempre se llevaban algún llamado de atención para que se dirigieran al set a grabar.

— ¿Has descansado algo? —Le había preguntado el moreno, buscando comenzar una conversación.— Discúlpame por hacerte desvelar anoche.

— ¡Ay, no! Por favor, Andresito... Bajo ningún motivo fue culpa tuya. Nos distrajimos bastante hablando. —Decía ella, poniendo una mano en el brazo de su amigo, como acostumbraba hacer siempre que hablaban.

— Sacaste varios temas de conversación durante la cena. —Chanceó Andrés.— Admite que buscaste la manera de que pasemos más tiempo juntos.

Aracely rápidamente soltó su brazo e, inconscientemente, mordió su labio inferior. Sintió sus mejillas arder de una manera inexplicable.

— ¡Ay, ya! Ya quisieras tú. La verdad es que no me di cuenta de la hora y, por lo que ya pudimos notar, tú tampoco.

Andrés rió al verla sonrojada.

— Pues, no voy a mentir...

— Muchachos, tenemos que comenzar con la grabación. Por favor. —Interrumpió alguien del equipo.

Aracely agradeció internamente esa interrupción. Sabía muy bien que Andrés no desmentiría el intento de broma que quiso hacerle y no estaba preparada para continuar con esa conversación.

Ambos se dirigieron hacia el set para comenzar.

Debían grabar el primer beso de Marcia y Esteban en la habitación que ambos compartían.

El director gritó "acción" y comenzó el rodaje.

Andrés se encontraba en la punta de la cama, quitándose el cinturón. Seguidamente entraba Aracely en escena, vestida con un pantalón de pijama de seda color gris con una bata a conjunto y un bustier negro.

Él tuvo que esforzarse para no quedarse mirando su figura, esa que en su primer escena juntos tuvo el placer de poder apreciar y tener sobre su cuerpo. Costó pero, como el buen actor que era, continuó con lo que debía hacer.

— Ay, me siento un poquitito mareada por el vino. —Decía ella, metida en su papel de Marcia Cisneros.

El moreno se acercó a ella, tomando su mano.

— Es que esta noche tomaste un poco más que de costumbre.

— Bueno, sí.

Aracely le sonrió y le dedicó una cálida mirada, recibiendo lo mismo por parte de su compañero.

— Ver a Rafa tan emocionado me hizo muy feliz. —Continuó él.— Muchas gracias, de verdad te lo agradezco... Qué bueno que me convenciste, hace mucho que debí haberle dado ese coche.

Los nervios que debía sentir Marcia en ese momento igualaban a los de Aracely al ver la devoción con la que el actor la miraba.

Entre medio de tartamudeos, continuó:

— ¿N-no se te hace tarde? —Soltó su mano y se alejó de él.— Te están esperando. —Decía mientras preparaba la cama para acostarse.— Tú ya sabes que eres una persona libre para hacer todo lo que quieras.

Andrés se acercó a centímetros de ella, quien volvió a mirarlo, regalándole una sonrisa nerviosa que no era parte del script.

— Ah, ¿sí? ¿Lo que yo quiera? —Preguntó el moreno, con una voz cargada de seducción.