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-Honestamente no me esperaba esto -admitió Jeno.

-Yo tampoco.

Ambos chicos miraban al techo blanco de la habitación de Jaemin.

-De verdad ni siquiera pasó por mi mente la idea de tu madre invitándome a quedarme a dormir y encima llamando a mi madre para pedir permiso. Dudo que haya muchas madres que hagan eso después de encontrar a su hijo encima de otro, besándose.

Jaemin no pudo evitar reírse ante ese comentario.

-Mi madre debe estar feliz de que al fin tengo más amigos además de Hyuck, y de que al parecer también alguien al que le gusto.

-Estoy seguro que le llegaste a gustar a muchas personas más, eres bastante lindo.

-Pero nadie me había gustado a mí, no hasta que llegaste tú.

-Ow, basta -pidió Jeno, avergonzado.- ¿Puedo preguntarte algo?

-Claro que sí -Jaemin se acostó de lado, para mirar a Jeno a pesar de la oscuridad del cuarto, Jeno hizo lo mismo.

-¿Desde cuándo te gusto?

-Oh -Jaemin agradecía que la oscuridad de la noche no dejará en evidencia el repentino color rojo de su cara por lo patético que se sentía.- Creo que desde hace más de medio año.

-¡¿Medio año?! -Jeno se sorprendió, pues si bien sabía de la existencia de Jaemin antes, nunca le prestaba atención pues solía alejarse de las personas extrovertidas.- Wow... ¿Planeabas decírmelo?

-No -admitió Jaemin riendo un poco.- Pero diste el primer paso, de verdad me alegro que lo hayas hecho.

-Es que... Sentí la necesidad de hacerlo, no sé, me acostumbré rápidamente a tu presencia parlanchina, a tus ojos emocionados cuando hablas y a tu rap verbal. Cuando te alejaste de mí no quería darle mucha importancia, claro que me comía la culpa, pero la verdad es que también te extrañaba.

-Ay Jeno, basta, no debes decir todas esas cosas -intentó Jaemin detenerlo, pues estaba avergonzado.

-Es que es la verdad. Después, tuve que contener mis repentinas ganas de besarte cuando hicimos las galletas, ahí confirmé que me hacías sentir muchas cosas, incluso sentí las famosas mariposas en el estómago cuando nos tomamos de la manos en la cocina.

-¡Yo también! -los ojos de Jaemin se abrieron más, mostrando su emoción.- Juro que sentí que moriría.

Ambos se rieron un par de segundos para después terminar en silencio, mirándose con una sonrisa.

-¿Y ahora qué sigue?

-No sé, jamás había llegado tan lejos.

-Yo tampoco.

-Supongo que podemos seguir normal, conociéndonos más y eso, no hay necesidad de apresurar las cosas -habló Jaemin con suavidad, sin despegar su mirada cálida de la de Jeno.

-Entonces así será.

-Jeno.

-¿Si?

-¿Me abrazas?

-Por supuesto que sí -Jeno se rió pues las preguntas de Jaemin le parecían bastante tiernas.
Pero la verdad es que también se sentía nervioso pues jamás había dormido abrazando a alguien.

Jaemin por su parte, le gustaba que lo abrazaran para dormir porque su madre y Donghyuck solían abrazarlo hasta que se quedaba dormido por tanto llorar, preguntándose por qué no le agradaba a los demás niños.
Así que siempre que Donghyuck se quedaba a dormir con él, también se abrazaban, pues era su costumbre desde pequeños.

Pero por obvias razones, con Jeno se sentía diferente.
Y a ambos le agradó.

¡Shit! i think i fucked up -Nomin.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora