Capítulo 78: Eco Del Pasado Presente

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Dos meses y medio atrás, Ciudad Goldenrod, Sector Central. Región de Johto. 11:01 P.M

La vista era más qué perfecta desde dónde él se encontraba, estando no solo colocado en perfecto silencio en una de las esquinas de la solitaria y espaciosa azotea del lujoso hotel en dónde se hospedaba junto con su compañero de trabajo y actual mejor amigo, sino qué además él permanencia estático al estar apoyado, con ayuda de sus brazos, sobre un firme barandal de concreto qué fácilmente le llegaba a la altura de su abdomen.

Enishi Tsubasa, también conocido por muchos en el pasado cómo el campeón sin corona de Johto y Kanto, rápidamente le da otro vistazo al vívido panorama de Goldenrod y su infinidad de rascacielos, avenidas repletas de personas y tiendas departamentales, bancos, centros comerciales, automóviles y semáforos, edificios de apartamentos, y vistosas y llamativas vallas publicitarias qué llegaban a iluminar y decorar todo hasta dónde su vista pudiese apreciar, dando al mismo tiempo un resplandeciente matiz tanto al oscuro cielo nocturno cómo también a la mayoría de edificaciones del sector, cuando un audaz e involuntario suspiro logró escapar de su ser.

A continuación, su fiel Persian, pokémon quien yacía sentado directamente a su derecha a escasos centímetros de sí con rostro dubitativo al también observar de reojo la ciudad desde encima del barandal de concreto, termina intercambiando efímeramente miradas con su entrenador.

-¿No te parece nostálgico el qué estemos aquí en Goldenrod de esta manera cómo en los viejos tiempos?- Preguntó Enishi al instante en un tono ameno, rompiendo a la vez el monótono silencio qué reinaba entre ambos, para luego acariciar la cabeza de su pokémon con la punta de los dedos de su mano derecha mientras qué volvía a observar el movido paisaje de una concurrida metrópolis qué no descansa. -A decir verdad, aún me cuesta creer qué ya pasaron veinte años desde qué-...

No obstante, Enishi efectuó un más qué fortuito alto en sus propias palabras cuando esté nota cómo su pokémon, en primera instancia, gira repentinamente sus orejas, para entonces voltear y apuntar también con su cabeza, en dirección a la solitaria caseta qué conecta la azotea con las escaleras principales del hotel, estructura localizada a poco más de quince metros de la posición actual del par al estar al otro extremo del lugar. Escasos segundos después de esto, un chico delgado y caucasico, de alrededor de dieciséis o diecisiete años, oscura y negra cabellera e intensos ojos color rojo fuego, acabó por hacer acto de presencia al abrir de lleno la puerta metálica de la caseta.

Otra breve oleada de silencio entró en vigor tras la súbita aparición del joven de oscura cabellera, mismo que, muy a diferencia de Enishi quien estaba vestido en ese momento con una elegante camisa de botones manga larga de color azul oscuro a juego con un pantalon liso del mismo tono, junto con relucientes zapatos de cuero en negro, esté otro vestía de manera más sencilla, comoda y casual. El recien llegado, en casi perfecta contraposicion para con el veterano entrenador, vestia con un sueter de color negro sin ningún tipo de logos, jeans clasicos en azul oscuro, un curioso chaleco sin mangas sobre su sueter qué era mayormente rojo con un destacable bordado blanco qué se extendia desde la parte del abdomen hasta el cuello, zapatillas deportivas negras con sus cordones en gris, y una vistosa gorra también de color rojo con detalles en blanco en la parte de la visera y que al frente tenia un llamativo estampado qué se asemejaba a la forma de una pokebola.

El chico en cuestión, en el momento en qué él ingresa a la azotea, instintiva y velozmente observa todo a su alrededor, percatandose casi de inmediato de la presencia de Enishi y su pokemon en una de las esquina al otro costado del lugar, pero además asegurándose con su mirada de qué no hubiese más personas qué ellos allí. Por su parte, tanto Enishi cómo Persian vuelven a intercambiar miradas el uno con el otro, antes de recorrer visualmente al recién llegado de pies a cabeza.

Johto: Gold, Silver y CrystalDonde viven las historias. Descúbrelo ahora