Capítulo 64: Ecos Del Presente Futuro

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Parte Sur, en las afueras de Ciudad Goldenrod. Región de Johto. 6:15 A.M

Con una dulce taza de cocoa caliente y un par de sencillas tostadas con queso fue cómo Crystal decidió iniciar otro día en la guardería pokémon que por muchos años sirvió cómo su hogar en un pasado no tan lejano. En ese preciso instante, y con solo una efímera mirada hacia afuera de la silenciosa residencia, se podía notar que el resto del día sería igual de gélido, frío y lento que cómo los que antecedieron a éste en aquel tranquilo suburbio de la que es considerada cómo la ciudad más importante de todo Johto.

Le gustase o no a las miles y miles de personas que habitaban en aquella concurrida metrópolis, no se podía negar que ya el invierno había hecho de las suyas y ahora una gran cantidad de opacas nubes recubrian impunemente todo el cielo, aunado a un ligero manto de nieve que también cubría los árboles, calles y aceras, muy a pesar de que el sol lentamente iba saliendo por el este.

Ya sea para bien o para mal, Crystal tenía muy inculcada la costumbre desde que era muy pequeña de levantarse al alba, incluso aunque no tuviera un despertador a mano, ya fuera para ayudar desde temprano en los diversos quehaceres de la guardería o solo para leer algún otro libro o revista de indole cientifica. En este sentido, en la actualidad eran muy pocas las veces cuando Crystal no fuese la primera en levantarse por la mañana entre Gold, Kelly y Zuki. No por nada ella fue la encargada del estricto itinerario que el grupo tuvo que seguir para recorrer casi por completo la región de Kanto en poco más de un mes.

Posterior a desayunar en perfecto silencio en el comedor de la sala, limpiando luego todo lo que había ensuciado al cocinar, además de bañarse y cepillarse los dientes, Crystal rápidamente regresa una vez más a su habitación para decidir cómo procedería para el resto del dia. En ese momento, el semblante de Crystal demostraba serenidad y tranquilidad, pero dentro de su mente se libraba una titánica lucha entre su acelerado corazón y su aún más mancillado orgullo, cosa que la llevó a dejarse caer boca arriba sobre su desarreglada cama. Ella, a pesar de todo lo sucedido el dia de ayer con Gold en el parque de diversiones, deseaba saber a cual decisión había llegado su compañero.

-"¡Hace unos días tomé una decisión con respecto a si escogí entre Kelly y tu!"-

-¿Qué demonios quisiste decir con esto?- Se preguntó entre dientes la ingeniosa chica, quien ahora miraba cómo insecto al fuego el girar de las aspas del abanico incrustado en el blancuzco techo con una mezcla entre molestia y resignación. -¿Por rayos tuviste que decir eso en ese momento tan inoportuno? ¿Tanto te costaba tomar una decisión antes de que todo esto sucediera? Ughh... No tienes idea de lo mucho que quisiera volver a golpear tu estúpido rostro. Si tan solo me hubieses dicho eso en otro momento nada de esto hubiese pasado y las cosas serían muy diferentes...-

Una y otra vez las palabras de Gold se repetían en el interior de la cabeza de Crystal cómo un molesto disco rayado dentro de un anticuado reproductor. Pero, a pesar del vibrante resentimiento que está ahora albergaba para con lo sucedido entre ambos, Crystal sabía que un inoportuno error no podía cambiar o borrar sus sentimientos así por así de la noche a la mañana. Quizás en otras circunstancias esté hubiese sido el caso y su amor por Gold se hubiese marchitado irremediablemente, pero su corazón sabía que existían un sinnúmero de factores externos que aún no estaban dentro de su ecuación mental. Crystal ahora tenía demasiadas preguntas y muy pocas respuestas a mano.

Con suma tristeza, Crystal volvió a reiterar mentalmente que era muy probable que las cosas jamás volverían a ser cómo antes, y la molestia y decepción que sentía recorrer por su cuerpo eran más que justificadas, pero errar es parte fundamental de la naturaleza humana y ella conocía mejor que nadie que en el fondo Gold era un buen chico. Al finalmente llegar a esta conclusión, después de varios incómodos minutos de mirar al vacío con desasosiego, aún estaba la interrogante de qué era lo que pasaba exactamente por la mente de su compañero cómo para decir lo que dijo de esa manera tan abrupta. ¿Qué tanto pudo cambiar en Gold luego conversar a sola con su padre y su posterior y fortuito encuentro con Raikou al dia siguiente?

Johto: Gold, Silver y CrystalDonde viven las historias. Descúbrelo ahora