#7. VENGADORA (Parte 3)

6K 440 209
                                    

Como he dicho en capítulos anteriores recordad que esto es ficción y que sabemos que no hay que permitir comportamientos así en la vida real.

-----------

—Hola, __________, un placer verte de nuevo —me dijo Loki con una siniestra sonrisa.

Intenté atacarle pero, sin saber cómo, mis pies dejaron de tocar el suelo y sentí como me trasportaba a otro lugar. No era dueña de mi cuerpo, este parecía viajar solo y no veía más que luces a mi alrededor, hasta que el viaje terminó y caí pesadamente al suelo, aterrizando en una enorme habitación más grande que mi propio apartamento.

Loki se alzaba ante mí, sonriente, y esta vez sí conseguí atacarle. Intenté golpearle en repetidas ocasiones propinando puñetazos y patadas, pero Loki esquivaba todos mis golpes sin dificultad y eso me enfadaba más.

—¡Maldito!¡Deberías estar muerto!¡Pienso matarte con mis propias manos!¡Te odio! —le decía cada vez que intentaba golpearle y él me esquivaba, sólo esquivarme, no intentó golpearme de vuelta en ninguna ocasión.

—¡Ya basta! —dijo Loki lanzándome un haz de luz verde que me hizo salir disparada hacia atrás aterrizando en la gigantesca cama que había allí.

Aquel ataque, por como me había lanzado, debería haberme herido, pero ni siquiera me dolió. Loki se lanzó rápidamente sobre mí e inmovilizó mis manos con una cadena por encima de mi cabeza mientras yo forcejeaba lanzando patadas al aire.

—A ver si te calmas un poquito. Te has vuelto mucho más agresiva —me dijo Loki.

—¿Qué quieres? Me dijeron que habías muerto.

—Sí... Todo el mundo se ha creído eso y ahora soy libre y rey de Asgard —dijo antes de soltar una suave risa—. ¿Te alegraste cuando te dijeron que había muerto?

"¿Me alegré?". Pensé mientras recordaba el vacío que se me había formado en el estómago con esa noticia.

—Ni te imaginas... Estaba deseando poder bailar sobre tu tumba —le contesté.

—Pues lamento aguar tus planes al estar vivito. Durante este año que he estado encerrado no he parado de pensar en ti, ni en la deuda que tienes conmigo.

—No tengo ninguna deuda contigo, en todo caso tú la tienes conmigo.

—Sea como sea, lo cierto es que a mí se me pone muy dura al ver como te resistes —me dijo colocando su cadera entre mis piernas para que notara su erección—. Y tú te humedeces al sentir mi control sobre ti.

—Estás loco... —dije obviando esa sensación de cosquilleo que volvía a invadir mi entrepierna.

—Oh, recuerdo una frase que me dijiste cuando estaba encerrado, algo que tenía que ver con cómo reaccionamos cuando alguien se acerca a una verdad que no queremos que se sepa. ¿Acaso crees que no sentí como te restregaste contra mí?

—¡Estaba intentando escapar!

—Eres una pésima mentirosa...

—Y tú un ser despreciable.

—Hagamos un prueba, y si la pasas te dejo ir y no vuelvo a molestarte jamás.

—¿Qué prueba?

Loki se inclinó y colocó su cabeza al lado de la mía, de forma que sentía su aliento y su respiración en mi oído.

—¿Recuerdas los instantes antes de que escaparas? —me dijo de forma suave—. La forma en qué acaricié tus pechos, no sólo con mis manos, sino también con mi lengua. ¿Recuerdas el tacto de mi lengua en tu piel?

LOKI LAUFEYSON // HISTORIAS Y ONE-SHOTS 🔞Donde viven las historias. Descúbrelo ahora