Gerard se había quedado dormido con la cabeza enterrada en el sofá, las piernas encogidas sobre su pecho, y un paquete de Doritos a medio comer que ahora solo eran moronas por toda la alfombra de la sala: su mamá lo matará.
Afortunadamente, de alguna forma, Mikey fue el primero en despertar, bajando a tropezones las escaleras en bóxers y la primera camisa que tomó del suelo de su habitación en un estado todavía adormilado; probablemente tenía que ver con que era sábado y había encontrado un maravilloso proveedor como 'regalo del cielo', el cual no estaba muy dispuesto a compartir con su hermano.
El chico de diecisiete años se encontró rodando los ojos cuando se asomó a la sala: la TV seguía encendida con el volumen al mínimo, pasando un noticiero que sabía Gerard no había estado viendo originalmente; tomó el control remoto de la mesita de centro y le cambió mientras Gerard soltaba un gran suspiro en sueños, acomodándose y enterrando el rostro aún más en los cojines.
Pensó que sería mejor dejar a su hermano en paz, incluso si la señora Way no estaría tan dispuesta a hacer lo mismo cuando notara las moronas de Doritos por toda la alfombra; finalmente decidió empujar la mayoría de las estas debajo del sofá y acercar más la mesita hacia el sofá en un intento de disfrazar todo el desastre.
Dejó el paquete sobre la mesita, y al hacerlo, encontró el celular de su hermano: la pantalla se iluminó con una explosión de luz brillante molesta mientras vibraba sobre la mesita. Mikey valoraba la privacidad de su hermano, pero su propia curiosidad era un demonio con el que no podía luchar, sobre todo sabiendo que no tendría repercusiones siempre y cuando fuera cuidadoso.
Con una mirada cautelosa en dirección a Gerard, inhaló con fuerza y tomó el aparato; la contraseña era su fecha de nacimiento desde hace años, y Mikey se preguntaba por qué le había insistido que la cambiara.
No quería entrar en modo mamá sospechosa que invade privacidad, y mirar todo en el teléfono, pero se decidió por abrir la aplicación de mensajes, y a su vez, la conversación con Bert.
Escaneó los mensajes rápidamente, no se molestó en subir demasiado, al estar satisfecho al ver que Bert le mandó mensaje diciéndole algo de que 'terminaban' cerca de las cuatro de la mañana, para lo cual Gerard seguramente se había quedado dormido antes de recibirlo; Mikey lo marcó como no leído y pasó a la conversación más reciente – la que lo había hecho notar la presencia del teléfono en primer lugar.
Esta lo tomó por sorpresa, por decir lo menos.
El nombre de contacto no decía mucho: una simple 'F', pero los mensajes decían todo lo que Mikey quería saber y más.
Había bastante coqueteo, pero coqueteo de secundaria y, de hecho, era incómodo y doloroso de leer, pero luego sus ojos dieron con el mensaje más reciente: '¿Nos vemos hoy?'
Mikey no sabía cómo reaccionar mientras marcaba el mensaje como no leído y ponía el teléfono de vuelta en la mesa, soltando un fuerte suspiro, antes de salir hacia la cocina.
Entonces, su hermano tendría un acostón, ¿de nuevo? Después de todo el asunto con Lindsey unos días atrás, y después de que Bert terminara con él a las cuatro de la mañana – y demonios, ni siquiera sabía que Bert lo había terminado aún. Mikey esperaba que el trauma de la ruptura detuviera a su hermano de ir y coger otra inocente víctima, sin embargo, lo conocía lo suficiente para decir que ciertamente ese no era el caso.
Finalmente, decidió simplemente sacar todo pensamiento de Gerard de su cabeza, y preparar algo de café.
Volvió a subir las escaleras mientras el agua hervía: se colocó unos pantalones encima, y tomó una sudadera del piso, y su celular.
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El Club De Élite De Personas Que Han Visto Desnudo a Gerard Way (Español)
FanfictionFrank es un estudiante de preparatoria irremediablemente chaparro, irremediablemente desesperado, y básicamente desesperanzado, cuyo único amigo es el chico asombrosamente alto del afro: Ray Toro. La escuela es mundana, la escuela es solo, bueno, la...