Te amo en todos los universos (Bakushima)

𝐂𝐀𝐏𝐈𝐓𝐔𝐋𝐎 24

•>¡¿𝐄𝐒𝐓𝐎 𝐃𝐄 𝐕𝐄𝐑𝐃𝐀𝐃 𝐄𝐒𝐓𝐀 𝐏𝐀𝐒𝐀𝐍𝐃𝐎?! 𝐍𝐎 𝐓𝐈𝐄𝐍𝐄 𝐍𝐈𝐍𝐆Ú𝐍 𝐒𝐄𝐍𝐓𝐈𝐃𝐎...<•

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Narrador.

Los rayos del sol entraban por una pequeña parte de aquellas cortinas casi cerradas, alumbrando un poco la habitación, ahí se encontraba un pelirrojo totalmente dormido en aquella cama grande y cómoda, bien arropado sin ganas de levantarse, teniendo un sueño que le parecía totalmente real, estaba con su pareja, con Bakugou, estaban juntos en un campo llenó de flores, árboles, naturaleza por todo lugar, parecía como si estuvieran en un bosque que ya reconocía, pero lo que más le gusto, esque estaba con el, con el chico de quien se enamoro y tuvo la gran suerte de que sus sentimientos fueran correspondidos para poder estar a su lado, diciéndole cuanto lo ama.

Ambos estaban acostados en el pasto, ensima de una manta que habían puesto, tomados de la mano entrelazando sus dedos como nunca, sin separarlos por nada del mundo, voltearon a verse cruzando miradas, ambos no despistaban la mirada, solo estaban ahí, completamente quietos, con el poco viento moviendo su cabello por los lados, acercándose poco a poco, para haci cerrar aquel pequeño espacio en un beso, uno muy tierno y dulce, transmitiendo todo el cariño que emitían ambos con todo amor, haciéndole saber al otro que de verdad lo ama y que no lo dejaría, por solo aquel beso es el que le gusta tanto al pelirrojo, el solo sentir los labios del pelicenizo, de su amado, de su pareja, es como si se sintiera querido y amado como nunca, sintiendo que será protegido siempre estando en sus brazos.

Pero como dicen algunos, aquellos sueños no duran mucho, en la realidad y cuando te quedas profundamente dormido, aunque quieras quedarte por horas, disfrutando de aquel sueño, no puedes, pero por lo menos disfrutas de los pocos minutos, segundos, que te brindan para poder seguir soñando.

En el sueño, después de aquel beso, se habrían separado para haci queriendo hablar el pelicenizo, pero el pelirrojo no pudo escucharlo, solo veía sus labios mover pero no lo escuchaba, no lo entendía, que apenas solo pestaño una vez por tan solo unos pocos segundos vio que el ya no estaba, era como si hubiera desapareció de repente, como si el viento lo haya llevado, lo buscó con su mirada desesperado por poder encontrarlo, pero nada, aquella naturaleza que había antes, se seco por completo, las hojas de los árboles cayeron al suelo quedando solo las ramas secas, las hojas ya caídas en el suelo se tornavan con un tono muy oscuro, las flores marchitaron, el cielo se volvió gris, comenzando a sentir en su rostro pequeñas gotas de lluvia, una lluvia delgada.

Lo único que quería ahora era de nuevo esos brazos a su alrededor que lo protegía, pase lo que pase, se sentía....solo....pero teniendo siempre ese presentimiento que aquellos brazos aunque no se sientan, aún lo siguen protegiendo, de lejos pero si.

Kirishima: No te vayas...de verdad quiero volver contigo, lo haré solo no me dejes...

Lo único que pudo hacer es abrazarse haci mismo, derramando lágrimas de sus ojos que caían desde sus mejillas, lo único que quiera y anhelaba era poder estar a su lado de nuevo, sin estar pasando por varías puertas que te llevan a otro lado donde ves a tu otro tu pero de otro universo y no ves al cual perteneces de verdad, pensando que de verdad volviste pero notas aquellas diferencias que no querías que fuera real, que no querías que haya pasado, sabiendo ya que no es tu hogar....o que posiblemente solo te hayan traicionado y cambiado todo aquello que construiste..