CUANDO LAS LUCES SE APAGAN ✔️

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¡Hola! Este capítulo contiene una escena +18 👀🔥

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La noche estaba fría, el viento soplaba indicando el inicio del invierno. Mi piel se erizó y acaricié mis brazos para disminuir el frío, Aron vio mi acción y me rodeo con su brazo para acercarme a él y brindar un poco de su calor. Yo lo vi a los ojos y le sonreí. Juntos estábamos caminando por el oscuro patio, nos dirigimos al edificio de los chicos para la fiesta.

Cuando llegamos, bajamos y entramos al sótano, los dos tomados de las manos.

Veo cómo nuestros compañeros se divierten; bailando, riendo, comiendo...

Todos necesitábamos algo así después de todo lo que ha ocurrido en estas últimas semanas.

—Una para ti —dice Paulo dándole una lata de cerveza a Aron—. Y otra, para ti —me entrega una y yo la acepto.

Recuerdo la última vez en la que estuvimos aquí, la noche en que Ximena...

Alejo esos tristes recuerdos y me concentro en disfrutar los pocos minutos de diversión que ahora tenemos.

Aron de un trago, se termina su bebida y cuando estoy por darle el primer trago a la mía, él me la quita y se la bebe.

—¡Oye! —le reclamo dándole un golpe en el brazo.

—Mmm. Tu bebida está... más rica —sonríe y me da un beso en los labios para, después, llevarme a bailar.

Sonrío y sigo sus movimientos, mientras escucho y veo cómo los demás bailan y ríen. Paulo y Araceli nos observan, Paulo sonriendo y Araceli... molesta. Paulo, al principio, no estaba de acuerdo con que Aron y yo estuviéramos juntos, pero ahora, parece que lo ha aprobado. Mientras que Araceli, amiga de Aron, no me acepta aún, pero... ¿Eso a quién le importa? Mientras yo esté con Aron y sea feliz, no importa quién esté de acuerdo o quién no.

Veo que alguien entra al sótano con pizzas y ese alguien se trata de John.

Él me ve bailando con Aron y de inmediato, aparta la mirada. Yo lo ignoro y continúo bailando hasta cansarme.

—Espera —le digo a Aron tomándolo de los hombros—. Ahora vengo —le sonrío y doy media vuelta, pero él me detiene y hace que vuelva a girar hacia él.

—¿A dónde vas? —frunce las cejas y me ve a los labios.

—Al tocador. Regreso en un minuto —le hago un guiño de ojos y me alejo de él.

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Soundtrack para la escena 🙈

Abro las llaves del lavabo y tomo agua con mis manos para después echármela sobre el rostro. Escucho que alguien entra y cierra la puerta del baño, así que, de inmediato, levanto la mirada y a través del espejo veo que se trata de Aron.

—¿Qué haces aquí? —frunzo las cejas al verlo sonriente.

—¿No puedo venir a verte? —dice acercándose a mí.

Sonrío mientras niego con la cabeza y me giro hacia él.

—¿Ni siquiera aquí quieres dejarme sola? —pregunto, divertida, porque Aron siempre ha estado conmigo, acompañándome y cuidándome de la sombra.

Él ríe y se pone frente a mí. Los dos nos vemos a los ojos por un largo tiempo, hasta que él se acerca y me besa los labios con ímpetu. Tomo el cuello de su camisa negra y lo atraigo más a mí, haciendo que nuestro beso se profundice. Siento nuestras lenguas chocar y nuestros labios danzar en un maravilloso compás.