Cómo demostrar amor

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Yoongi vió por unos minutos dormir a Jungkook, siempre se veía muy lindo y debía admitir que estaba muy feliz de estar con él... Sin embargo, le preocupaba que el maknae no se diera cuenta de cuánto lo amaba.

Yoon odiaba mucho el contacto físico, no era como si no lo intentase... Era más bien algo que le habían inculcado desde pequeño, como si las muestras de afecto estuvieran mal.

— Hmm... Es imposible dormir si me ves así... – dijo Kook.

— Lo siento, es solo que te ves muy lindo – admitió, pero aún así se sintió extraño como si lo hubiera dicho de forma seca.

— Está bien, no me molesta realmente. Se me hizo muy tierno – dijo el maknae sabiendo las complicaciones que tenía su novio para demostrar amor.

Aún así Yoongi quería mejorar y no sabía cómo, por eso con mucha vergüenza había acudido a Namjoon.

— ¿Quieres saber... Cómo demostrar amor? – preguntó el líder confirmando lo que había dicho.

— Shhhhhhhh, no lo digas tan fuerte... – contestó Yoongi.

Nam soltó una carcajada.

— Tratas el lado cursi como normalmente la gente trata el sexo – se burló nuevamente.

— Solo... Ayúdame, ¿sí?

— Hmmm yo creo que Jungkook sabe perfectamente que lo amas... Aún así... Tal vez ya que no te gusta el contacto físico podrías demostrarlo con actos... Ya sabes, invitarle su comida favorita, comprarle algo de regalo como cosas de videojuegos y anime, escribirle una carta – le sugirió Namjoon viendo cada vez como se sonrojaba el mayor — Pero, hyung lo más importante es que sepa que puede confiar en ti....

La imagen de Jimin llorando se hizo presente en Nam haciendo que hiciera una mueca.

— Que confíe en mí... ¿De qué manera...? – preguntó Yoon sin entender.

— Bueno... Kook tiende a ser muy duro consigo mismo debido a su título adquirido... Si algo no le sale se estresa de más, así que si llega a pasar debes hacerle ver qué está bien no ser perfecto todo el tiempo y que lo sigues amando así – explicó Nam.

Yoongi asintió.

— Entonces.... Tú.... Deberías contarle a Jimin de aquello, ¿sabes? Mostrarle... Que tampoco tienes un "cuerpo perfecto" – le dijo con mucho cuidado porque sabía que era algo complicado para el líder.

— Supongo... Que tienes razón... Lo haré... – admitió sabiendo que Yoongi tenía razón.

Con aquel pensamiento durante todo el día Namjoon se preparó para confesarle la parte más difícil de su vida a Jimin, aquella que quería olvidar aunque aún había veces en las que la oscuridad se apoderaba de él...

Supuso que por estar pensando en eso aquel día no pudo regresar y Jimin tampoco por estar pensando en que tal vez su novio lo odiaba por ser tan inseguro.

— Tengo que enseñarte algo – le comentó al llegar a casa, tomó su mano y de inmediato fueron al cuarto.

— ¿Qué pasa Nam? – preguntó Jimin sin comprender qué pasaba.

— Tú crees... Qué a diferencia de ti... Tengo "un cuerpo perfecto", ¿cierto? Y eso... Es lo que te da inseguridad... – comenzó a decir Nam, Jimin vió al piso por la vergüenza.

Todo lo que le estaba diciendo era cierto y se sentía mal por eso.

— ¿Y si... No es así? ¿No soy tan perfecto como crees? – continuó Nam.

— ¿A qué te refieres...?

El líder suspiró profundamente.

— No es que me moleste ser líder, solo que es algo demasiado difícil a veces... Aparte de que.... Yo siempre he sabido lo que la gente dice de mí... No soy quien quisiera, no soy nada ni nadie cómo tú piensas...

La voz de Nam se había quebrado un poco, pero finalmente se dispuso a hacer aquello...

— Yo, estoy... Lleno de cicatrices que nunca he enseñado a alguien... Bueno una vez tuve un problema y tuve que acudir a Yoongi... Pero no fue porque quisiera... Ah... Mejor te muestro...

Nam bajó un poco su pantalón y boxer del lado derecho dejando al descubierto varias cicatrices, unas más grandes que otras pero una sobresalía más que las demás.

Era vertical y gruesa, se veía que había necesitado puntadas.

— Esta sigue hasta un poco más de la mitad de mi pierna... Supongo que intenté por todos los medios irme de este mundo... En algún momento Yoongi-hyung me encontró y me llevó al hospital.... Mintió por mí aunque era obvia la mentira – explicó riendo amargamente.

Jimin lo abrazó fuertemente sorprendiéndolo.

— Gracias... Por contarme... Pero... Sigues siendo perfecto para mí.... – le dijo.

Nam le regresó el abrazo tiernamente.

— Es lo mismo que digo yo... No importa qué... Para mí tú eres perfecto – explicó Nam.

Y entonces comprendió aquello... Y asintió con la cabeza.

— Te amo, mucho...

Namie ! ~ FinalizadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora