▪No te enamores de la Luna...Enamórate de mí ▪KTH✔

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              __Sung Mi Soo__

— ¿Ya nos vamos? — asentí viéndola correr de un lado de otro, bajando hacia la primera planta y agarrar su mano entre la mia para cruzar la carretera camino a la casa de Lia, aquella mujer había sido como una madre en poco tiempo y aún mi corazón se mantenía cálido a su lado.

Mi cuerpo cayó de rodillas ante la pequeña, agarrando sus hombros y voltearla hacia a mí.

"No causes problemas Haneul, sé que molestarás a los dos hermanos."

Sonreí al verla colocar su manito en su pecho y asentir.

"Vamos"

La puerta principal ya nos esperaba entre abierta, adentrándome junto a la pequeña y detener mi vista en un par de zapatos de hombre, y mis ojos se cerraron al saber a quien le pertenecían.

Mi recorrido siguió por sus costosos pantalones hasta llegar a su camisa, detallando una parte de su pecho afuera y notar que había llegado reciente de su trabajo, y antes de poder detallar su rostro, sentí un jalón por parte de Haneul a mi derecha y maldecir en mi cabeza.

¿Se habrán dado cuenta de mi escaneo?

Ignoré cualquier voz que afirmara a esa pregunta, alzando mi cabeza y chocar con sus ojos, sintiendo una corriente recorrer mi columna y enderezarme más de lo común, notando la risita de la menor a mi lado y apretar su mano mientras me acercaba a ambos, teniendo arriba nuestro a la señora Kim llenándonos de besos y seguir sintiendo su fuerte mirada en mí, volviendo a alzar mis ojos junto a los suyos y sentir el tiempo paralizarse nuevamente.

¿Seguiríamos en este estúpido juego o actuaríamos como personas adultas ante nuestra situación?

Pero mi mente aún le pertenecía en gran parte a esa niña asustadiza, y sabía que siempre me encontraría corriendo de cualquier situación que implicara sentimientos, y solo por miedo a sentir amor, un miedo que había desarrollado y hoy por hoy lo consideraba estúpido, pero estaba ahí, presente en mi vida.

Sus acaramelados ojos brillaron por un instante, viéndolo caminar a mi dirección y los latidos de mi corazón eran desenfrenados, sintiendo mis dedos picar al tener sus labios cerca de los míos y cerrar mis ojos disfrutando del pequeño contacto que me obsequiaba.

Una tormenta se desataba en mi cabeza al sentirlo separarse de una manera tortuosa y lenta, siendo espectadoras de esta escena mi pequeña sobrina junto a la madre del castaño.

— Te extrañé — y dejando aquella información delante de mis asombrados orbes, escapó en dirección a su habitación causando estragos en la boca de mi estómago.

¿Acaso eran esas malditas mariposas? ¿Por una simple palabra?

Y sin poderlo detener, mis pies comenzaron a andar sin mi consentimiento detrás de aquel hombre que huía como un cobarde de sus propias palabras.

 
                        ☾☾☾

           __Kim Tae Hyung__

¿Un cobarde? Sí, era un maldito cobarde al huir de aquella situación. EunBi estuviese soltando carcajadas al verme actuar como un maldito adolescente y Jin de seguro no pararía de molestarme por el resto del año.

Sus delicados dedos rodean mi muñeca, deteniendo cualquier acción de esconderme en mi habitación y enfrentarme a sus ojos nuevamente en la noche.

El silencio siempre había sido parte de nuestros encuentros, y a pesar de eso, siempre nos sobraban palabras para comprendernos.

— ¡Tía! — nuestra conexión fue interrumpida por la pequeña, la cual corría como loca a nuestra dirección y Mi Soo voltearse al ver como dirigía mi atención a otra cosa.