ˊ𓁹ˏ

513 47 21
                                    

(OMORI)
.
.
.

Sunny pasaba con cuidado por los pasillos de su casa. Era de noche y tenía miedo por tanta oscuridad y silencio que se encontraban inundando el hogar del peli-negro.

El chico se encontraba buscando a su hermana, puesto que le había escuchado bajar las escaleras crujientes. Pasando de vuelta por las escaleras camino a su habitación rendido al no poder encontrarla, vio como una sombra pasaba rápidamente por el pasillo de arriba.

Subió con cuidado las escaleras para no tropezar llegando por fin a la parte de arriba. Miro hacia los lados en busca de algo pero no vio nada, se dirigió a la habitación de su hermana para ver si no se encontraba ahí pero sus ojos se horrorizaron al ver tal escena.

Su hermana se encontraba sosteniendo una soga entre sus delgadas manos, se encontraba arriba de una silla perteneciente al escritorio de la habitación, portando su pijama y un cabello desaliñado con un rostro lamentable.

Sunny no pudo hacer nada más que quedarse petrificado por lo que su hermana estaba por hacer. Vio como esta se colocaba la soga en su cuello como tal bufanda en invierno.

Asustado trato de llamar a su hermana, pero las palabras parecían que se dejaron con candado en algún lado de sus cuerdas vocales impidiéndole el habla al chico.

Observó como Mari quitaba la silla de bajo de ella con un empujón haciendo que esta cayera. Pero gracias a la soga en su delicado cuello, impidió que la joven volviera a tocar el suelo, dejándola ahí colgada cual dije en cadena.

En un intento desesperado de mover su cuerpo, Sunny por fin pudo abrir la puerta de la habitación llamando la atención de su hermana, la cual ya hacia agonizando por culpa de la falta de aire que tenía y la presión en el cuello que no se hacia de esperar.

Soltaba aquellas lágrimas que rogaban que su hermana bajara de ahí y se acercara a abrazarle como siempre hacia cuando estaba asustado y herido. Pero sabia que no era posible, y no podía hacer nada. No se encontraba nadie en aquella casa más que ellos dos, solos, solos con aquella oscuridad que solo se dejaba iluminar por la tenue luz de la Luna.

Trato de moverse de nuevo, pero sólo logró que se tropiece por sus torpes pasos que daba al estar en shock. Miro sus manos, las cuales estaban raspadas por la caída, volviendo la mirada a su hermana la cual ya no se estaba moviendo o mostrando algún señal de vida asustando más al chico.

Solo pudo observarla ahí colgada, con su cabello tapando su rostro a excepción de una parte del ojo y labios los cuales mostraban una mirada espeluznante que no le apartaba la mirada a Sunny.

En un movimiento involuntario se levantó y salió corriendo de aquella casa sin importarle si estaba descalzo o sin algún suéter que le cubriera del frío de la noche. No le dio importancia hacia donde corría ni si se perdía, solo quería irse lo más lejos de aquel lugar donde su hermana ya se hallaba muerta en las frías manos de la oscuridad de su habitación.

Corrió hasta cansarse y quedar tirado en el suelo frío de las calles llegando a estar un tanto bastante lejos de aquella casa que ahora quería olvidar. Olvidar aquella escena que le dejó una marca en su memoria al ver a su hermana en ese estado, ver aquel cuerpo de tal querido ser colgando. Ver aquel rostro en la oscuridad que le observaba.

Estaba llorando, desesperado por olvidar esa imagen. Cerraba los ojos en busca de no verlo pero su memoria le traicionaba en ese momento impidiéndole descansar.

Se abrazo a su mismo en un intento desesperado de consuelo, consuelo que solo le trajo más lágrimas a los ojos ya rojos e hinchados por tanto llanto.

Esperaba que fuera abrazado por su hermana diciéndole que todo estaba bien y que sólo era un mal sueño, pero ese momento no llegaba.

Se abrazo más fuerte y cerraba los ojos con fuerza cuando sintió un abrazo que lo relajo y sintió que aquel abrazo era empático y cariñoso mostrando en la forma tan delicada de sostenerlo.

Abrió los ojos notando a un chico, un chico parecido a el, un chico que parecía que había salido del espejo solo para abrazarlo y darle tan ansiado consuelo que le hiciera saber que todo estaba bien.

Sunny paro de llorar y quedo dormido ante el manto de la noche, ya no le tenía miedo a aquella oscuridad y a aquel frío que ahora se encontraba otorgándole un abrazo consolador ante la situación que había presenciado hace unos momentos.

Quedó abrazado toda la noche con aquel chico similar de pies a cabeza a el. Quedó abrazándose a si mismo por toda la noche que transcurría hasta la mañana, hasta que despertara y todo pasará. Sabía que están bien ahora, sabía que se encontraba en compañia de un chico que le conoce y esta para el.

—todo estará bien.

.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
(𓁹)


































Te Protegere...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora