Hermanastros a la fuerza, Alex vuelve, y Eddie vive con su mente en dos, Brie es su hermanastra, se enamoran, pero el destino parace esforzarse de sobra para que ellos nunca estén juntos.
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<<Eddie y Alex>>
Narra Eddie:
Llevo una semana en Chicago, y el cambio ha sido abismal, el segundo día me perdí en pleno centro, y es que prefiero omitir esos detalles con Brie en las llamadas por Skype. Prefiero que me vea como un chico de ciudad. El apartamento que comparto con Alex es chico, pero tiene dos habitaciones, y el espacio necesario para nuestra coexistencia en el mismo lugar, en el fondo, somos de la misma manada, y simio no mata simio.
Me gusta este punto al que hemos llegado con Alex, y es que a pesar de las confusiones que hubo tras su retorno que me ha tomado por sorpresa, hemos sabido transformar nuestra relación a una totalmente de amistad, ella no tiene sentimientos por mí, y yo no por ella, a veces me aguanta lloriqueos por Brie, y a veces de broma, me dice que es lo que debo pagar por haber sido un hijo de puta, pero después me abraza, y me dice que no es muy metalero de mi parte llorar.
Y eso ha sido una linda parte de nuestra relación, por otro lado, sí me preocupa su trabajo, y se lo he dicho, ha encontrado momentáneamente trabajo de mesera en un bar, pero los bares de acá no son como los de nuestra ciudad, son más peligrosos, hay más gente, y por ende, más hombres con malas intenciones . A veces siento que no está del todo consciente sobre esos peligros, pero sé que dentro de todo Alex se sabe defender, la vi pelear con un cliente un día que pasé a buscarla después de la universidad.
Por mi parte, prefiero mi otra universidad, de partida porque puedo ver a Brie, la verdad es que no he logrado hacerme de un buen grupo de amigos, me ha tocado aprender un poco de varios instrumentos, y escuchar todo tiempo de música, si es puede llamársele música a ciertas cosas. La semana es dura, siempre hay algo que hacer, comunicarme con Brie no siempre es fácil, a veces realmente no puedo, pero ella lo entiende, siempre hay un momento para decirle un te amo, ella está entusiasmada con ir a Australia, y yo le digo que tenga cuidado con los surfistas, y que si me deja por uno, soy capaz de irme al mismísimo continente de Oceanía a matarlo. Ella se ríe, de manera educada, sé que no me lastimaría, y sé que hace todo su esfuerzo por creer en mí.
Siento unas risas provenientes de la sala de estar, son las diez de la noche, Alex llega del trabajo a esa hora, le he dicho que intente buscar en otros lugares, pero ella se ve cómoda ahí, le dan sus comidas y se queda con propinas, a veces creo que en parte es rebeldía, pues Julian, ha ofrecido pagarle otra carrera y buscarle un trabajo en el acuario donde sigue trabajando hasta la fecha, él es biólogo marino, pero ella está ensimismada en lograr su independencia, de igual forma, presto atención a sus pasos, se lo he comentado a Brie.
Voy a la cocina, he dejado preparando café, se viene una larga noche de estudio. Así que salgo de mi cuarto, y camino a la cocina, para llegar es necesario pasar por la sala de estar, y me encuentro a Alex, ha llegado más graciosa de lo normal, ha estado de fiesta, en ese trabajo, le dejan beber alcohol como parte del pago, no me parece lo más apropiado, pero ella es una chica grande, tampoco digamos que ha llegado ebria a casa, pero me preocupa que algo le pueda pasar, y no sólo ha llegado ella, sino que ha llegado con una chica, probablemente en el mismo estado, me fijo en la piocha, es la misma que usa Alex, así que eso me da indicios de que es su compañera de trabajo, y al parecer se llama Megan.
