¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
***
MinSeok entró a la casa de JongDae sin tocar. Mientras silbaba una canción, entró a la cocina y sus silbidos se apagaron cuando vio a ChoRong bailar. Se quedó boquiabierto mientras miraba el seductor movimiento que hacían sus caderas al moverse y al parecer, ChoRong no había notado su presencia porque seguía bailando al ritmo de la música que provenía de la radio al mismo tiempo que cocinaba.
MinSeok se aclaró la garganta para llamar su atención. ChoRong al fin paró de bailar y se volteó.
— Oh, hola... – tratando de recordar su nombre, ChoRong frunció el ceño – ¿MinSeok?
— Hola, nena ¿Bailas para mí?– ChoRong se sonrojó, pero aun así ignoró su comentario y siguió cocinando como si nada.
— ¿Cómo entraste a la casa? JongDae siempre le coloca seguro a la puerta y no te oí entrar.
— Tengo una copia de las llaves de la casa – MinSeok se apoyó en el marco de la puerta y la observó. No pudo evitar fijarse en el atractivo culo, y en lo estupendo que sería poder tocarlo. Si tan solo no fuera el mejor amigo de JongDae... – hablando de JongDae, ¿Sabes donde está?
— Salió hace un rato, dijo que volvería mas tarde.
— ¿Qué estas cocinando?
— Un pastel para él – sonrió sin dejar de revolver la cuchara de palo en el recipiente – ¿Quieres probar un poco?
— Claro que si.
— Acércate – MinSeok caminó hacia ella.
ChoRong cogió un poco de la masa con la cuchara para voltearse y llevarla directo a su boca. Como un niño obediente, MinSeok entreabrió los labios y saboreó hasta el último rastro de la masa.
— Mmh... Chocolate – dijo mientras se relamía los labios – está exquisito, ChoRong.
— Gracias, espero que a JongDae le guste también.
MinSeok la miró y fue ahí cuando tomó conciencia de lo cerca que estaban. Fácilmente podría inclinarse y besarla. Un pequeño rastro de chocolate posaba en la comisura de los labios de ChoRong, y la idea de quitárselo con los suyos era tentadora.
Mientras la observaba, MinSeok notó que sus ojos tomaron un brillo especial y por un momento creyó que era por él, pero luego llego a la razón de todo esto: JongDae. ChoRong estaba enamorada de él. Sólo había que oírla hablar de JongDae y notar el brillo en sus ojos. Una ligera oleada de celos lo invadió. JongDae si que era un tipo con suerte.
— ¿Interrumpo algo?
La voz de JongDae lo sobresaltó. Girándose, lo encontró en la puerta con los brazos cruzados sobre su pecho mientras los miraba detenidamente. Los ojos de ChoRong iluminaron al instante de verlo.
— ¡JongDae! – exclamó sonriente y sin dudarlo se lanzó a sus brazos.
Pero ChoRong se alejó de él al sentir que no le correspondía el abrazo. La cara de JongDae se mantenía inexpresiva mientras la apartaba de él, rechazándola. La sonrisa en la cara de ChoRong se borró, y el brillo en sus ojos desapareció.
— ¿Pasa algo? – preguntó, JongDae la ignoró. En vez de responderle, se dirigió hacia MinSeok.
— Sígueme. Necesito hablar contigo.
MinSeok miró por última vez a ChoRong y encogiéndose de hombros, siguió a JongDae por las escaleras.
—————- ♥ —————
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
