xxCapitulo 9xx

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Me desperte en medio de dolores intensos de cabeza, ya no lo soportaba, tenia la frente sudada debido al calor de la mañana.

Mire alrededor de la habitación en la que me encontraba, este lugar no se me hacía conocido, tome mi celular tenía 10 llamadas pérdidas de mi familia putativa, me mataran pensé seguidamente.

¿Y Lodovica? ¿Y Javier? ¿Y Diego? ¿Dónde se habían metido?

Me pare de la cama, mi cuerpo extrañamente me pesaba, arregle mi vestido y armandome de valor abrí la puerta para averiguar donde estaba.

Cuando la abrí salí hacia un pasillo que al contrario de la habitación se me hacía familiar.

Camine un pasos con cuidado y llegue a un living comedor.

Mire detalladamente, ¿Que diablos hago acá? Pensé.

-Alba- escuche una voz.

Me di la vuelta.

Y vi parada a mi tía ya vestida.

-Hola Tía me puede decir algo-hable.

-Si claro, eso si eso mientras comes algo-solté y camino hacía el sector del comedor.

-¿Qué diablos hago acá?-solté sin previo aviso.

-Jaja la verdad ni yo lo tengo muy claro, anoche Lucas y Mateo llegaron contigo a casa, tu estabas inconsciente-hablo mi tía.

-Ah- solté.

-Hasta que al fin se levantaron-dijo la mujer nuevamente.

-Tenía hambre ya-soltó mi primo.

-Si al igual que yo-soltó Mateo.

Se sentaron al frente y a mi lado en la mesa y los mire con cara de extrañada.

Mi tía nos sirvió el desayuno y salió del lugar.

-¿Quién de los dos me va explicar que hago acá?-solté rápidamente.

Lucas mordió el pan y me miro riendo.

-Digamos que nos preocupamos por ti anoche ya que no te vimos más, te llamamos al celular, nos respondió un machote español y te fuimos a buscar-soltó Este último.

-No ya cuénteme la verdad-bufe rodeando los ojos.

-Es la verdad-soltó mi otro primo riendo.

Los mire dudosa.

-Javier y Lodo no me pasarían a cualquier chico que diga que es mi primo-solté.

-Para algo sirve el carnet, además deserias agradecernos te salvamos de una grande primita-dijo Lucas.

-Imagínate que tu familia putativo te ve llegar así a tu casa, en el estado que estabas ayer, te hubiesen matado-soltó Mateo.

-Les debo una-solté.

De pronto una música invadió la habitación y el silencio en el que se encontraba.

-Alo guapo-soltó Lucas atendiendo el celular.

Por un rato deje de escuchar hasta que.

-Facu, ya nos vemos acá-soltó mi primo.

Con que con el estaba hablando, eh.

-¿Que quería bro?-soltó Mateo.

-Viene en camino, dice que tiene que contarnos una grande-soltó Lucas.

¡¿Qué?!

-Supongo que no te molesta que venga-tosio-Facu-soltó finalmente.

Abrí levemente los ojos.

-No para nada-rode los ojos.

-Yo tengo que ir a, aa ver algo-solté finalmente.

Corrí hacia el baño, estaba hecha un desastre.

Me di una rápida ducha, me vestí con el mismo vestido, me peine y hice un leve maquillaje.

Listo, perfecta.

Salí del baño y escuche su voz, su dulce voz.

Me dirigí hacía el comedor, me sentía incómoda pero tenía que enfrentarlo, tenía que verlo a los ojos y aclarar las cosas.

-Alba-soltó inmediatamente al verme sorprendida.

-Hola Facundo-hable tratando de sonar natural.

-¿Por que no me dijeron que estaba Alba acá?-soltó casi en susurro dirigida hacía mis primos.

Me cruze de brazos.

Un silencio invadió la habitación.

-Chicos me dejan a solas con alba, para hablar-soltó Facu cortando el silencio.

Los vi saliendo de la habitación.

-¿Sentemonos?-Soltó con su clásica sonrisa.

Me senté a su lado.

-¿Que pasó con la rubia mentirosa?-solté mirandolo a los ojos.

-Yo eh, nosotros-soltó algo nervioso.

-¿Ustedes?-pregunte.

-Ayer aclare las cosas con ella-soltó finalmente.

-¿Por que me besaste?-soltó de nuevo dejándome paralizada.

-Yo, no lo sé, fue lo unico que se me ocurrió-solté siendo muy honesta.

-¿Lo único que se te ocurrió? No sabes los problemas que tuve por tu impulso-soltó riendo irónicamente.

-No te hagas ahora el bueno, Tú me seguiste el beso, fue una pequeña venganza-solte un molesta

-No sabía como reaccionar, es cierto que te seguí el beso pero no fue lo más inteligente tu idea, ahora Mía esta aún más enfadada conmigo-soltó estresado.

-¿Por que la defiendes tanto? Ella fue la que te engañaba, no yo Facundo- solté enojada.

-Pero ella fue muy importante para mi y aún la quiero ¿Sabías?-soltó enfadado pasándose.

Me pare y lo enfrente.

-Perdón, no sabía, no es justo que me eches toda la culpa a mi-solté.

-Ese es el problema, no sabes nada, no me conoces ni un poquito Alba-soltó duró.

La rabia me invadía.

-Tu menos a mi Facundo, lo que si se es que ¡eres un arrastrado!-solté yendome.

-¡Y tu una niña mimada que hace todo lo que se le de la gana!-escuche su grito.

Salí de allí enfurecida.

----------------------- La Chica Rebelde

La Chica Rebelde •FalbaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora