Capítulo 13

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Las micelas se podían observar por la luz que entraba por los cortes de la tela, a mitad de la tarde con el cielo tornándose naranja. No se escuchaba nada más que el viento viajando por el lugar, y los fuertes latidos del corazón de Anthony. acababa de confesarse y sentía que en cualquier momento esos latidos se detendrían. Louis seguía procesando lo que acababa de escuchar, seguía como si no le hubieran dicho nada pero en el fondo se estaba muriendo, al igual que Anthony. El menor se empezó a desesperar por no ver ninguna, absolutamente ni una sola reacción por parte de Louis. Se arrepintió de haberlo dicho, seguramente no era mutuo y solo acababa de hacer el ridículo. Se empezó a culpar por haber hecho eso, ahora seguramente Louis lo odiaría.

-Annie.- el menor espero atentamente, esos pocos segundos de espera de verdad que lo estaban poniendo muy mal.- Annie...- Anthony empezó a tener miedo ya que no percibía nada por parte del mayor. La ansiedad creció.

-Sabes...y-yo no.- dijo arrepintiéndose, tratando de buscar las palabras correctas para convencer al mayor que no lo decía enserio.- Es qu- .- cuando el menor iba a continuar sintió como Louis se abalanzó hacia él. Cuando se dio cuenta, pudo sentir los labios delgados del mayor sobre los suyos. Anthony reaccionó después de unos momentos pero cuando lo hizo introdujo lentamente su lengua a la boca de Louis buscando la lengua de este.- Lou...- dijo Anthony entre jadeos, fue un beso desesperado y rápido, ambos sabiendo ahora que era mutuo.

Cuando Anthony regresó a su casa estaba más feliz que nunca, hasta se le había olvidado que antes ese mismo día tuvo un bajón emocional muy duro. Fue directo a la cocina para preparar algo, revisó recetas de internet hasta que encontró la receta ideal. Estuvo varias horas escuchando música mientras horneaba un pay y bailaba, hasta hubo un momento que Ava salió de su cuarto para acompañarlo. Anthony estaba de muy buen humor.

A pesar de su felicidad de ese día, el menor no pudo dormir nada por todos sus sentimientos y por lo que le había pasado. Volvió a recrear el beso con Louis muchas veces y cada una de ellas sonreía como un tonto. Hubo un momento en el que tuvo que pensar en que tendría que exponer a Louis en frente de toda la escuela, sabía que iba a ser doloroso pero que tenía el apoyo del mayor. Pero definitivamente era algo que quería evitar, detestaba que su debilidad terminará arruinando a las personas importantes para él.

Por la mañana del día siguiente trato de ver el lado positivo de todo, después de varias semanas que no bajaba a desayunar, hoy lo hizo. Decidió comer cereal con leche y quiso tomar un té, no es por que realmente le gustara sino que le recordaba a Louis. Media hora después su mamá llegó para sentarse a su lado. Se sorprendió cuando vio a su hijo desayunando, hace mucho que no lo veía ahí. Mientras ambos comían la mujer pudo ver un cambio más alegre en su hijo, también le pregunto el por que de su felicidad y Anthony tuvo un pequeño colapso por que no sabia que decir. Al final le terminó diciendo que había sacado diez en química.

El menor pasó todo el fin de semana ansioso esperando a que fuera lunes, ya quería hacerlo para terminar su sufrimiento. Pero si tan solo fuera más valiente no tendría que hacerle eso a Louis. Cuando llegó el lunes el mayor al igual que los días anteriores, este fue a la casa de Anthony para ir juntos a la escuela. Sobre todo porque Louis sentía que el menor iba a necesitar apoyo emocional y quería estar para él por cualquier cosa.

-¿Estás listo?- preguntó el mayor antes de entrar al edificio.

-Tengo muchísimo miedo.- dijo con la voz temblorosa.- Se que me voy a sentir muy mal conmigo mismo, no me lo perdonaría nunca.- el mayor se acercó para abrazarlo.

-Annie, esta bien, estarás bien, estaremos bien.- Anthony suspiro fuertemente y se separó para verlo a los ojos.- Yo no estaré contigo cuando lo hagas, pero si sientes que no puedes más necesito que vengas conmigo.- al menor le brillaron los ojos, quizás fue porque tal vez le lloraron los ojos, pero bueno.

Dos caras una monedaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora