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Hagan como que la imagen si es de Adrien y Mael, casi no hay imágenes de ellos dos jajaja

[...]

— Okey papá, si, buenas noches.— dijo Adrien antes de entrar a la habitación.

— Es increíble que me dejara quedarme.— estaba acomodando las sábanas en el suelo.— Solo he venido un par de veces y aún así fue amable.

— ¿Qué haces? — me pregunto Adrien mientras se acercaba.

— Acomodo donde dormiré.

Sin preguntarme tomo mi mano y ambos caímos en su cama.

— Claro que no, dormirás aquí conmigo.— sonrió feliz.

No pude evitar abrazarlo, es tan tierno.

— Si entra alguien en la noche esto será un problema.

— No va a pasar, es la primera noche que pasamos juntos.— jugueteaba con su dedo en mi pecho.— Así que duerme aquí conmigo.

Me convenció.

— Eso fue fácil.— dijo riendo y volvió a abrazarme.— Quedémonos un rato así.

— Si quieres toda la noche.— lo acomode abajo de mí y bese su frente.— Eres una ternura, ¿sabes lo peligroso que es que durmamos juntos? — quite un mechón que estaba tapando su frente.

— Se las consecuencias.— colocó sus brazos alrededor de mi cuello.

Esto es jodidamente malo.

— ¿Ah si? — me acerque a su rostro y lo bese.

Conforme el beso iba subiendo de intensidad, comencé a hacer algo nuevo. Pase mi mano por debajo de su camisa.

— Um esta frió.— dijo con voz temblorosa.

Abrí mis ojos y mire a Adrien, en esta posición esta tan vulnerable. Su cabello alborotado por la caída, sus labios colorados por los besos y su cara sonrojada hacían que quisiera tomarlo.

— Tal vez luego.— saque mi mano de su camisa y bese su nariz.— Tenemos toda una vida para hacer esto, hoy hay que pasar tiempo juntos y divirtámonos.

Antes de que me levantara el tomo mi sudadera.

— ¿No quieres hacerlo conmigo? — su expresión hablaba por el.

— No es eso.— acaricie su cabello.— Todo está bien, ¿si?

— Entonces ¿por que no? — desvió la mirada tal vez por lo avergonzado.— Se como se hace entre dos hombres, no te preocupes por mi.

Su voz sonó temblorosa, esto es más de lo que él puede soportar.

— ¿A si? Nunca había salido con un hombre antes, ¿me puedes decir como se hace?— creo que puedo molestarlo.

— E-Eso.— se sonrojó mucho, esto es tan divertido.— Si te lo explico, ¿lo intentaremos?

Este chico no se cansa, tal vez puédenos divertirnos hoy.

— No necesitas explicármelo, sé que será vergonzoso.— me reí fuerte, su rostro es magnífico.— Ademas si se como se hace, solo te estaba molestando.

— Maldito.— comenzó a golpearme y ambos jugamos hasta que el termino arriba mío.— ¿Qué tal si te atacara en este momento?

— Me gustaría ver eso.— coloque mi mano en su trasero.— Si no es que yo te ataco primero.

— Veremos quien gana.— el comenzó el beso una vez más.

Comenzó a quitar su camisa y después me ayudó con la mía.

Nuestra promesa |Adriel| BLDonde viven las historias. Descúbrelo ahora