Capítulo XXVI.

42.4K 2.1K 727
                                    

Contiene un poco de +18

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Contiene un poco de +18

Capítulo 26 | Podría ayudarte

14 de julio

Bajé del vehículo, quedándome a un lado con la puerta abierta. Mis ojos se posaron en la infraestructura de al menos diez pisos con un enorme letrero en la parte media. Uno que me hizo saber que nos encontrábamos en el lugar correcto.

Negué

«Academia de ballet para niñas talentosas»

Eloise no es talentosa, no comprendo qué hace aquí.

Alisson se bajó también, observando todo con el ceño fruncido. Cerró, dando algunos pasos para detenerse a una distancia prudente. Ojeó cada rincón, cruzando sus brazos.

Tenía el cabello suelto, bastante largo a mi parecer, vistiendo unos vaqueros y sus típicas botas. Mi vista pasó inquisitivamente a la parte trasera de su anatomía.

Respiré hondo. Y en eso, ella se giró hacia mí

—¿Qué? ¿Te arrepientes?

—No debí dejar que me convencieras.

—Mal hermano —acusó—. ¿Cómo no vas a venir al recital de Eloise?

—Pues así. No vengo —cerré la puerta, de forma un poco tosca—. Ali, pudimos estar haciendo algo más... interesante que esto.

Entrecerró sus celestes ojos

—No vayas a decir tonterías.

—No son tonterías —sonreí—. ¿Por qué? ¿Te sonrojas?

—Elliot, no seas estúpido —bufó—. Entremos, ¿quieres?

Bajé mis lentes de sol hasta mi nariz, solo para guiñarle un ojo. Aquello no pareció agradarle, aunque tampoco le desagradó. Se acercó a mí, retirando el objeto de mis ojos para doblarlo y dejarlo en el cuello de mi camisa. De paso la arregló un poco, todo bajo mi atenta mirada

—¿Listo? —enarcó una ceja

Me quedé observándola, cautivándome por la forma peculiar que tenían sus orbes de brillar, quizás por la luz del sol, o quizás porque me estaban viendo a mí.

De las dos formas, me gustaba.

—¿Se te perdió algo? —se burló, al ver que no respondí

—Te quiero —solté, sin pensar

Todo ápice de diversión que reflejaba se borró más rápido de lo que pensé. Incluyendo su intento de sonrisa, se fue para dejar una confusión marcada en sus facciones. Algo que se vio más como sorpresa que como alegría.

De acuerdo, no era la reacción que me esperaba

Tal vez no debí decirlo tan pronto.

Abrió y cerró su bonita boca, sin ser capaz de pronunciar algo coherente. Pasaron los segundos y se mantuvo estática, como si estuviera teniendo una lucha interna consigo misma y al mismo tiempo intentara asimilar la situación.

El brillo de las estrellas✓Donde viven las historias. Descúbrelo ahora