Sugar Rush Drama [YoonSeok]

15. Corazones rotos y besos robados🫗

El estruendoso portazo que dio Jungkook al abandonar el aula fue el preludio del desastre que se avecinaba. El ruido que resonó en la clase ya vacía sobresaltó al profesor Kim, que solo entonces se dio la vuelta y vio que tenía compañía; Park Jimin no se había marchado aún.

El chico caminó hacia su escritorio con aparente tranquilidad, aunque por dentro le temblaba todo. El gran día había llegado, el momento de confesarle a Taehyung lo que sentía por él.

Taehyung era un profesor joven que había iniciado su carrera como como docente apenas tres años atrás. En ese tiempo nunca había mirado a ningún alumno de otra forma que no fuera como su maestro, y por ello quería creer que sus estudiantes tampoco le mirarían a él como algo más que un profesor.
Por supuesto, no era ajeno a que había gente que le encontraba muy atractivo y le ponía ojitos, pero mientras quienes le "admiraban" supieran imponerse límites, no tenía problema con ello e ignoraba olímpicamente cualquier tipo de insinuación.

Sin embargo, un estudiante estaba a punto de cruzar esa raya que no debía cruzarse...

— Señor Kim, tengo que hablar con usted sobre algo importante.

— Claro, ¿qué necesita?

El hombre pensó que iba a comentarle algo sobre la clase o hablarle de sus notas, pues Jimin era un alumno aplicado y era probable que quisiera hacer algún trabajo extra para mejorar su calificación final. Estaba a punto de llevarse la sorpresa de su vida.

— Verá, yo... — a Jimin ya empezaba a notársele el nerviosismo, y no era para menos dada la situación. Carraspeó para cerciorarse de que su voz sonara firme y no temblorosa mientras apretaba con fuerza las mangas de su propia sudadera. El color de su cara se tornó ligeramente sonrosado en comparación con el minuto anterior — Quería decirle que llevo tiempo enamorado de usted, señor Kim. Desde que le conocí me di cuenta de que es usted un hombre culto, interesante, de buen corazón... — el chico hizo una pausa, mordiéndose el labio con una leve sonrisa. — Y atractivo también. Solo quería decírselo y preguntarle si usted... en fin, si estaría dispuesto a darme una oportunidad y salir conmigo alguna vez.

Se instaló un silencio extraño en el aula cuando el joven hubo terminado de hablar.

A medio camino entre la incredulidad y el pasmo, Taehyung había enmudecido, completamente anonadado ante la declaración de amor del estudiante. Lo que le sacó del trance fue la guinda del pastel, cuando Jimin dio paso adelante y, aunque no se atrevió a besarle en la boca, sí que le plantó un tímido beso en la mejilla... Muy cerca de la comisura de los labios.
El profesor no supo si lo había hecho gracias a un descaro innato que poseía, o valiéndose del valor insuflado por el enamoramiento, pero aquello estaba mal se mirara por donde se mirara.

No obstante, viendo el rubor en su rostro y la adoración con que le miraba, no tuvo corazón para regañarle por el atrevimiento que había tenido al besarlo. También le sabía mal tener que rechazarle, pero no podía mentir y decirle que sentía algo por él cuando no era así. Taehyung suspiró, se masajeó el puente de la nariz y se tomó unos instantes para escoger bien sus palabras; unas que no le hicieran daño a Jimin.

— Park, me siento muy halagado por todo lo que acaba de decir, pero... — había un "pero", solo con eso Jimin ya supo que las cosas no iban bien. Sus temores se confirmaron un instante después. — No puedo corresponder a sus sentimientos, lo siento mucho.

— Hay... ¿alguien más? — murmuró el rubio. Tenía en mente a Jungkook porque era el único rival en potencia del que tenía conocimiento, mas el docente rebatió su teoría.

— De hecho, sí. Tengo una relación seria desde hace varios años y amo a mi pareja, eso es todo.

Oh, de modo que los rumores eran ciertos. El mayor no mencionó nombres, pero si el cotilleo de que tenía pareja era verdad, era muy probable que el nombre de la pareja en cuestión también lo fuera. Qué afortunado era el profesor Wooshik... Jimin esperaba que ese tipo supiera apreciar lo que tenía.